Apareció la mística, se trajo un empate y lidera el grupo

Por Martin Cabrera

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Medellin, colombia

Enviados especiales

E studiantes tuvo una noche fiel a su historia copera y alcanzó anoche en esta ciudad un gran punto que le permite seguir liderando, junto con Libertad de Paraguay, el Grupo 7 de la Libertadores. Fue 1 a 1 ante Atlético Nacional de Medellín.

En el final del primer tiempo el local se había adelantado por intermedio de Zeballos y en el complemento Leo Jara lo empató, en lo que fue el primer gol de su carrera.

Fue un partido inteligente de Estudiantes, que lo deposita como uno de los equipos a respetar en esta edición 2015 del trofeo continental más importante de todos.

DE LA PRESION ALTA AL ERROR EVITABLE

El primer tiempo había empezado bien para el Pincha. La idea de Pellegrino fue clara: presión alta, es decir, sobre la salida del dueño de casa y trabajo en bloque entre el fondo y la mitad de la cancha para cortar la elaboración verdolaga.

En esa idea de partido, fue fundamental el aporte de Cerutti, que además de presionar rompió al fondo adversario con gran capacidad en el uno contra uno.

El Pincha se plantó con un 4-4-2, aunque no fue del todo homogéneo, porque en la línea de volantes Román Martínez no pudo hacer el trabajo con recorrido amplio que sí concretó en la derecha Jara.

Por eso, el punto flaco del equipo fue el sector izquierdo de la defensa. La molestia muscular de Román no le permitió al ex Tigre colaborar (tampoco siente esa variable del juego) con Alvaro Pereira, por lo que el oriental sufrió muchas veces el dos contra uno y Berrío lo desbordó con facilidad. Por ese costado el “paisa” tuvo dos chances claras en la primera media hora.

Estudiantes respondió con salidas rápidas en transición y más de una vez logró tomar al local mal balanceado en defensa. Como a los 35 minutos, cuando Román pisó el área y cerca estuvo de marcar con un disparo que fue desviado al tiro de esquina.

La pelota parada también fue importante en el primer acto. En el minuto 39 el Chavo Desábato estuvo cerca de marcar, tras un gran centro de Cerutti.

El Pincha tenía el trámite controlado sobre el final del primer acto. Parecía solucionado el problema del sector izquierdo cuando Damonte, que venía siendo clave en la contención, cometió un error de bulto, entregó mal una pelota hacia atrás y el pase corto acabó en corrida y gol de Pablo Zeballos. Parecía que se iban al descanso en tablas, pero una equivocación alteró la historia.

CON UNA REFERENCIA

De movida en el complemento Pellegrino apostó a su delantero referencial en el ataque. El ingreso de Carrillo llevó al equipo a reacomodar las piezas, Cerutti se volcó como carrilero por la izquierda y el de Magdalena hizo dupla en la ofensiva con Matías Rosso.

Como esa variable no dio resultado, rediseñó el Pincha una vez más el libreto, con el ingreso de Sánchez Miño, que recaló en la izquierda y le permitió al “Pocho” jugar más adelantado.

Y de los pies de Cerutti vino el gol de Leo Jara. El ex Olimpo puso una gran pelota en el minuto 23 y luego el correntino la picó con gran precisión para empardar la historia.

Incluso lo pudo haber ganado en los últimos cinco minutos, con una chance clara en los pies de Auzqui (la tiró por arriba) y otra de Aguirregaray.

El cierre del partido fue perfecto en lo estratégico del lado del Pincha. Se aprovechó de los nervios y el bajón anímico del local, manejó los espacios y consolidó la sumatoria de la unidad.

Una excursión redondita para este Estudiantes que sigue soñando con llegar bien lejos en la Copa.