El último que apague la luz

E l mercado de pases 2015 en Estudiantes no será recordado por las compras sino todo lo contrario: por la incesante reducción del plantel.

El primero en irse fue Guido Carrillo. Lo hizo por la puerta grande, con bombos y platillos y un ingreso de 10 millones de dólares para las arcas del Club, que los necesitaban como el agua. Como su salida era muy esperada no llamó tanto la atención.

Pero el éxodo no se terminó con el delantero. La dirigencia necesita bajar el presupuesto del plantel y este medio ya había advertido que había varios nombres de futbolistas en un borrador. Entre ellos Rafael Delgado, Agustín Silva, Matías Aguirregaray (foto) y otros. Y por ese lugar transita el rumbo actual de la dirigencia, que en las últimas horas estuvo más abocada a conseguir clubes para estos jugadores que en otra cosa.

Rafael Delgado, sabiendo que no iba a tener lugar y aprovechando que en su contrato firmado hace apenas seis meses se contemplaba la chance de rescisión, no dudó en subirse al primer colectivo. Le dijo que sí a Defensa y Justicia y firmará a préstamo por un año. El pase le pertenece y con el Pincha ya no tendrá más relación. El jugador ayer se entrenó junto al plantel y también iría hoy hasta el Country, porque recién a la tarde rescindirá su contrato

Otro que levantó la mano y aceptó una salida fue Matías Aguirregaray, que en diálogo con una radio uruguaya admitió que ya habló con su papá para regresar a Peñarol.

El Vasco Aguirregaray llegó a Estudiantes en julio de 2013, durante la presidencia de Enrique Lombardi y con Agustín Alayes como secretario técnico. En ese momento se le compró el 40% de su ficha.

El jugador tuvo un arranque prometedor, pero una seria lesión lo dejó sin Mundial y su nivel decayó bastante. Como tiene uno de los contratos más altos del plantel y en esa posición Gabriel Milito tiene a Mauricio Rosales y Leonardo Jara, le dieron vía libre.

“Yo fui a hablar con el director para volver a Peñarol. Tengo la ilusión de regresar. Milito todavía no sabe nada de que me quiero ir”, dijo el miércoles por la noche al programa Sport 890 de Montevideo. Su salida parece estar más que escrita, aunque de momento nadie llamó a la dirigencia albirroja de la institución carbonera.

Lo quieren a Auzqui

Otro jugador que podría hacer sus valijas es Carlos Auzqui, a quien lo estarían buscando del Club Las Palmas de España, que acaba de conseguir el ascenso a la Liga.

Además también habría un equipo mexicano interesado en este polifuncional que puede jugar como volante o delantero.

En el Pincha están dispuestos a escuchar la propuesta y negociar en caso de que interese.

Leo Jara: ¿U$S 5 millones?

A Leonardo Jara lo estuvieron observando desde Europa y en las últimas horas habría llegado una oferta muy tentadora del Dnipro de Rusia, el subcampeón de la Europa League. Se habla de una cifra cercana a los 5 millones de dólares.

De todos modos en el Pincha se quieren jugar la carta del correntino para destrabar la llegada de José Sosa. Podría ser parte de la negociación, porque los turcos necesitan un jugador para ese sector de la cancha.

¿Y Diego vera?

Otro jugador que está en la mira de un equipo importante de Argentina es Diego Vera, a quien lo busca Independiente a través de su técnico Mauricio Pellegrino.

Viruta llegó al Pincha cuando el Míster era el técnico y evidentemente le dejó una muy buena imagen. Entonces, caído Germán Denis al Rojo y enterado que en La Plata buscaban otro delantero levantó el teléfono.

Ayer este medio alertó del interés del Rojo y al mediodía se produjo una reunión a la vista de todos entre el jugador y el presidente Juan Sebastián Verón. El Pincha quiere retenerlo, pero si la oferta es tentadora se sentarán a escucharla. “Sólo lo dejaremos ir si pagan un buen dinero”, contó un allegado a la dirigencia.

Luna se fue antes que nadie

En materia de salidas, el adelantado fue Jorge Luna, a quien trajo Pellegrino en 2013 y dejó ir a préstamo el año pasado a Chile. En Estudiantes ni el técnico y mucho menos los dirigentes lo querían de regreso. Entonces consiguió una oferta de Emiratos Arabes y el Pincha lo acompañó. Al menos recuperó medio millón de dólares.