“Por suerte voy a estar poco tiempo afuera”

El misionero Oliver Paz Benítez se encuentra en etapa de recuperación de una lesión muscular que lo vino a sorprender cuando se estaba consolidando como titular en el Lobo. A despecho de este inconveniente el defensor no pierde la fe ni la confianza y admitió que “es una lástima tener que parar ahora, pero dentro de todo lo bueno es que será por poco tiempo. Lo cierto es que la saqué barata”.

Y explicó a continuación la manera en que sufrió esta lesión. “El otro día en la práctica, en una jugada que vino tras un pelotazo largo, sentí una molestia y salí de la cancha por precaución. Los médicos, que son los que saben de esto, me hicieron una serie de estudios y por desgracia se comprobó que tengo un micro-desgarro. Igual estoy tranquilo porque dentro de todo son pocos días los que estaré fuera de las canchas”.

El diagnóstico inicial prevé, según los médicos del club, una recuperación de dos semanas para esa lesión. Y siguió explicando Benítez: “Nos dimos cuenta, antes de los estudios, que era algo más que una contractura. Cuando me fui a mi casa me puse un poco de hielo y seguí las indicaciones que me dieron. Pero el dolor no se me pasó, continuó. Entonces quedó claro que era algo más que una molestia. Es una lástima tener que parar, pero dentro de todo lo bueno es que será por poco tiempo. La saqué barata”.

Claro que pronto estará de regreso y, con toda seguridad, recuperará su puesto en el equipo titular.

“Este es un torneo largo y puede pasar cualquier cosa. Hay margen hasta el final. Cuando se da algo como esto (por la lesión) no hay que desesperarse, porque uno ve que también ocurren en otros equipos. Y está claro que va a seguir pasando. Igual espero no tener que volver a parar”.

A continuación Oliver Benítez dejó su análisis con respecto a la posición que venía ocupando que, por supuesto, no es la natural pero a la que ya parecía haberse acostumbrado. “Venía jugando en una posición que no era la mía, pero es una posición que ya conozco. Venía tratando de aprender cosas partido tras partido, y de tener en cuenta las indicaciones que me venían dando (Pedro) Troglio. Ahora, lamentablemente, no me va tocar estar por dos semanas, así que espero tener la chance de seguir jugado cuando me recupere”. Y completó así su análisis: “Siendo autocrítico, quiero tratar de ir levantando mi nivel, no sólo por mí, sino para que pueda serle útil al equipo”.

Según el misionero “el lateral, más allá del poder ofensivo que pueda tener, lo primero que tiene que priorizar es marcar, y después cuando tenga un hueco tratar de pasar y darle una mano al equipo en ofensiva. En el tema de la defensa algo manejo, por ahí me falta un poco en la ofensiva”. Claro que también es necesario manejar otras cuestiones, y Benítez ya lo tiene aprendido. “La velocidad me ayuda un poco para adaptarme al puesto, pero a veces me juega en contra, porque me confío y me juega una mala pasada. Y en ese sector de la cancha cometer un error no es bueno para el equipo. De chico siempre fui rápido. En el colegio, con tal de no estar en clases me anotaba en todo, iba a atletismo y trataba de aprovechar la velocidad, que se fue mejorando con el tiempo”.