Un arquero uruguayo apareció en el horizonte de Gimnasia

A partir de mañana, el diálogo de Pedro Antonio Troglio con la dirigencia del Lobo se reanudará con intensidad, porque tras el viaje del director técnico al exterior, para unos días de vacaciones, seguro le interesara conocer el cuadro de situación con miras a las posibilidades de compra-venta de jugadores para la conformación del plantel con el que contará en la temporada 2016.

La relación, como se recordará, llegó a estar muy tensa entre las partes, al punto que el DT consideró la posibilidad de abandonar el cargo más allá del contrato que tiene firmado, y después de un acercamiento se plantearon una serie de temas sobre los cuales trabajar para acelerar los tiempos.

Los representantes de la Comisión Directiva plantearon la necesidad de transferir a Ignacio Fernández en caso de surgir una propuesta beneficiosa en lo económico, y se mantuvieron firmes en no incluir al arquero Nicolás Navarro en el nuevo proyecto, lo cual obviamente determinó la necesidad de sumar a jugadores en esos puestos.

La búsqueda de un arquero ha sido el punto de partida para los negociadores de Gimnasia, y por más que falta una semana para que el plantel ponga en marcha la preparación en el predio deportivo de Estancia Chica, las noticias por ahora no son demasiado alentadoras, al menos por lo que trascendió.

Fernando Monetti, de Lanús, fue el candidato número uno, aunque Lanús no parece dispuesto a transferirlo a préstamo; también se habría caído la posibilidad de Julio Chiarini, de River, y Federico Crivelli, de Temperley, con quien se trabajó por “debajo”, renovó un largo contrato con el Gasolero.

El Lobo necesita un arquero, sí o sí, tras el alejamiento de Navarro y la decisión que tomó Bonnín, el suplente, de buscar la posibilidad de jugar en otro club

En la víspera, fuentes ligadas a la dirigencia albiazul dejaron trascender que hubo un contacto por el uruguayo Luis Torgnascioli, de Danubio. En realidad nadie confesó la identidad, aunque consultas realizadas hasta anoche por este medio, incluyendo a medios periodísticos del vecino país, permitieron adelantar que se trataría del capitán de Danubio.

Torgnascioli tiene 25 años, porque es categoría 1980, y se afirmó en Danubio durante la última temporada, cuando de suplente pasó a ser titular, jugó hasta partidos de la Copa Libertadores, y considerando el campeonato de Uruguay resultó el jugador local con más presencias en un equipo: 38.

Más allá de este arquero uruguayo, por quien se habrían solicitado condiciones para una transferencia inmediata, negociadores del Lobo también habrían efectivizado un contacto por César Rigamonti, cuyo pase es de Belgrano de Córdoba, aunque en el campeonato que pasó atajó para Sarmiento de Junín.

Para completar el cuadro de los arqueros que fueron considerados por los encargados de elegir, y de los que pueden ser, está Adrián Gabbarini, quien tuvo un buen momento en Independiente, aunque desde un primer momento no fue considerado primera alternativa.

El volante pedido por Troglio para el caso de un alejamiento de Nacho Fernández, por ahora puede esperar, ya que las negociaciones continúan, pero sin tener un punto final. Lo que debe ser negociado, y ya con cierta urgencia, es la contratación de un arquero.

Claro, porque más allá de la salida de Navarro, a quien Troglio aconsejó retener, aunque la dirigencia lo descartó, en las últimas horas se reforzaron los trascendidos de que Yair Bonnin está buscando un equipo para tener un arco propio.

Con chance reducida en el conjunto albiazul, donde perdió el puesto luego de haber sido confirmado como titular tras el pase de Monetti, el futuro del arquero suplente del Lobo parecería estar en la Primera B Nacional. Chacarita Juniors sería una alternativa, y Boca Unidos de Corrientes otra. Pero lo cierto es que la intención de Bonnin es jugársela en otro equipo.