Nuevo delegado de Los Hornos con curioso antecedente

El nuevo delegado municipal de Los Hornos, Daniel Arteca -designado por el intendente Julio Alak hace una semana-, estuvo hace seis años involucrado en una investigación realizada en la Municipalidad, ordenada por el mismo Alak, en la que se concluyó que se estaban produciendo "graves irregularidades en el funcionamiento" de ese centro comunal. Y concretamente se dio por probado en aquel sumario que Arteca cumplía importantes funciones en la delegación pese a que no era empleado municipal ni tenía ningún tipo de relación laboral con la Comuna.

La situación dio origen a fines de 2001 a un sumario interno, en cuyo transcurso se tomaron testimonios, que indicaron que Arteca funcionaba como "encargado del área administrativa, atendía al público, daba órdenes y permisos a los empleados" y firmaba documentación, como "memorandos en los que se ordenaba el envío de tierra para el mejoramiento de calles". El problema fue, como se dijo, que Arteca no era empleado municipal ni tenía designación de ningún tipo para cumplir función alguna en el centro comunal hornense.

De acuerdo a la documentación a la que tuvo acceso EL DIA, la investigación interna fue ordenada por el intendente Alak y ejecutada, como instructor, por el entonces y actual secretario de Gobierno municipal, Oscar Martini. En su marco, Alak pidió a la Suprema Corte que designara peritos calígrafos, que confirmaron que la firma que figuraba en memorandos de la delegación de Los Hornos era, efectivamente, de Arteca.

Hace una semana, Alak firmó el decreto de designación de Daniel Arteca como nuevo delegado municipal de Los Hornos y lo puso en funciones en una ceremonia a la que asistió, entre otros funcionarios, quien instruyó el sumario de hace seis años y dictaminó "la existencia de graves irregularidades" en aquel centro comunal, el secretario de Gobierno Martini.

Ante esta designación y aquel antecedente, este diario consultó a Martini, quien dijo que los episodios de 2001 fueron "de neto corte burocrático administrativo, irregularidades internas; no se cometieron ilícitos".

El funcionario además cargó las tintas sobre el entonces delegado municipal, Gustavo Princi. "Todo fue producto del mal manejo que tenía Princi; el problema lo tuvo el delegado", afirmó, y desestimó el rol de Arteca indicando que era parte de "un grupo que trabajaba con él" (con Princi), y afirmando que "no tuvimos constancias de que diera órdenes".

Luego, Martini intentó restarle gravedad también al rol cumplido por el delegado en los hechos. "Incluso él mismo (Princi) no hizo nada", afirmó. Y prometió enviar al diario, al día siguiente de la consulta, copia del sumario interno que se realizó en su momento.

El secretario de Gobierno de la administración de Alak no suministró la copia prometida, pero el diario tuvo acceso a esa documentación, en la que puede verse que tanto él como el Intendente calificaron la situación que se había creado en la delegación de Los Hornos como "graves irregularidades en el funcionamiento" de ese centro comunal.

EMPLEADOS "NO SON"

Todo comenzó a fines de octubre de 2001, cuando un empleado municipal denunció que tres hombres, a los que identificó puntualmente -Daniel Arteca y otros de apellidos Finelli y Raingo- cumplían funciones en la delegación de Los Hornos pese a que no eran empleados municipales.

El 30 de octubre, a fojas 15 del expediente 4061-081825 iniciado con la denuncia, el intendente Alak designó instructor del sumario al secretario de Gobierno, Martini, quien pidió a la dirección de Personal que informara si Arteca y los otros dos denunciados pertenecían a la planta permanente o temporaria de la Municipalidad.

El 6 de noviembre, por nota, el director de Personal informó que ni Arteca ni los otros dos denunciados pertenecían a las plantas de empleados del municipio.

Martini, entonces, pidió que se tomaran testimonios de varios empleados de la delegación, quienes corroboraron los términos de la denuncia (ver aparte).

EL DECRETO 1411 DE ALAK

Siempre de acuerdo a la documentación disponible, el 15 de noviembre el intendente Alak firmó el decreto 1411 con relación "a la producción de graves irregularidades en el funcionamiento" de la delegación de Los Hornos.

Allí, el jefe comunal consignó que se estaba investigando la "presencia de personal ajeno a la comuna que realiza tareas específicas del organismo comunal en la delegación, y se atribuye funciones y facultades que no ostentan y que no pueden habérseles sido legítimamente otorgadas por no tratarse de agentes municipales", indicando que esas tareas "habrían sido encomendadas a aquellas personas por el delegado Princi".

En mismo decreto, Alak consideró que durante la investigación "se ha ido agregando documentación de la que resulta la existencia de actos suscriptos aparentemente por las personas denunciadas, quienes estarían actuando en el ejercicio de funciones que no le competen".

Y en consecuencia, dispuso suspender preventivamente al delegado, Princi; medida que fundó en "la gravedad, características y alcance de los hechos denunciados" y en que los testimonios y la documentación ya "permitían" a esa altura "suponer la existencia de graves irregularidades administrativas".

PERICIAS Y REACCION DEL DENUNCIADO

El Intendente, asimismo, pidió al presidente de la Suprema Corte la designación de un perito calígrafo "para determinar la autenticidad de las firmas" de Arteca y los otros denunciados en documentos oficiales; pedido que fundó en "la gravedad del hecho". Así, actuó la perito judicial Sánchez Vilar, quien dictaminó que, en el caso de Arteca, "se han verificado concordancias identificatorias de comunidad escritural entre ambos extremos estudiados".

Mientras tanto, Martini citó a Arteca quien, según un acta que firmaron ese funcionario y Jorge Lescano Gorordo como asesor general de la Comuna, reconoció que cumplía "funciones colaborando con el delegado, no siendo empleado municipal", y señalando que "no tenía horario fijo y que colaboraba en tareas administrativas y comunitarias".

Días después volvieron a citar a Arteca para que reconociera su firma en memorandos de la delegación. Pero entonces el denunciado optó por negarse a participar de ese trámite, a través de una nota que envió al Municipio y en la que planteó que había sido "objeto de una insólita citación" en un "trámite interno administrativo de la Municipalidad", subrayando que "jamás he sido designado como agente de la misma". Afirmó que "en consecuencia no me cabe citación alguna de vuestra parte ni la obligación de realización de acto alguno en el expediente" en cuestión, "que me es por ello enteramente ajeno". Y terminó advirtiendo que se reservaba "derechos y acciones" contra la Municipalidad.

El episodio concluyó, en fin, con el desplazamiento de Princi de su cargo de delegado de Los Hornos. Ahora, seis años después, Arteca volvió a ese centro comunal como su nuevo titular.