Nuevos ataques vandálico a la Escuela 22 de La Granja

No alcanza a reponerse de un robo que enseguida sobreviene otro. La Escuela Media Nº 22, ubicada en La Granja, volvió a ser blanco del vandalismo en dos hechos que se sucedieron sin solución de continuidad: el jueves pasado manos anónimas rompieron una reja y sustrajeron utensilios de la cocina y el domingo último forzaron otro sector del cerco y vaciaron el buffet, donde se guardaban artículos de librería. Entre 2010 y 2011 acciones similares atentaron contra la institución en 17 oportunidades.

Ayer a la mañana, cuando las autoridades del colegio de 520 entre 138 y 139 accedieron a las instalaciones no podían creer lo que veían. En un episodio casi calcado del anterior, ocurrido tres días antes, una reja había sido vulnerada, estaban rotos los vidrios del buffet y habían desaparecido un horno eléctrico y útiles escolares como carpetas, cuadernos y mapas. "El jueves pasado habían entrado a la cocina y se llevaron alimentos y una radio", contó un integrante de la comunidad educativa de la escuela, sorprendido por la seguidilla de roturas y hurtos.

La denuncia por ambos hechos consta en el destacamento policial La Unión -137 entre 524 y 525-, donde se presentó el regente de la Media 22, Hugo Boggi, y relató lo ocurrido el jueves y el domingo. Sobre el primer caso, con imágenes registradas a través de las cámaras de seguridad, en la seccional se presume que el acto vandálico fue obra de dos menores, mientras que no se tienen pistas sobre los posibles autores del segundo ataque.

En la Media 22 no saben qué hacer para evitar el vandalismo. Apenas arrancó el ciclo lectivo y ya entraron dos veces al edificio del colegio, una mala señal para la comunidad educativa sobre todo que se tiene en cuenta que en 2010 se vivió la misma situación en 12 ocasiones y durante 2011 se repitió 5 veces. Tan relevante resulta el "ranking" dentro de los establecimientos de enseñanza violentados que a principios del año pasado fue elegida entre las escuelas donde la Municipalidad decidió instalar cámaras de seguridad.

Como resultado de los numerosos ataques la sala de computación quedó en una oportunidad desmantelada, mientras que en otro saqueo incendiaron el archivo administrativo, entre los casos considerados más graves. "Hay robos y se llevan objetos materiales, pero sobre todo dañan por dañar y algunos son daños irrecuperables; abren la escuela para romper más que para cualquier otra cosa", se planteó desde el establecimiento.

La 22 tiene dos edificios y 1.280 alumnos. En el más antiguo -el que da a 520- cursan unos 700 chicos de primero a tercer año de la secundaria, en dos turnos. En tanto que por la noche funciona la escuela de adultos. La instalación nueva -519 y 138- reúne a los estudiantes del ciclo superior: cuarto, quinto y sexto de secundaria.