Corvina rubia

La corvina rubia tiene cuerpo fusiforme, moderadamente elevado, comprimido pero levemente deprimido a la altura de las aletas pectorales debido al ensanchamiento de la parte ventral del cuerpo en esa zona. Está cubierto por escamas grandes y fuertes.

La línea lateral corre aproximadamente paralela al dorso del cuerpo y se continúa sobre la aleta caudal. Cabeza grande. Boca pequeña, con una leve prominencia de la mandíbula superior, que presenta una serie de tres poros marginales y 5 posteriores. En la mandíbula inferior, 5 poros y una serie de 4 pares de barbas diminutas, que pasan generalmente desapercibidas. Preopérculo aserrado. La aleta dorsal escindida en dos partes, la primera está compuesta por radios duros solamente y la segunda por un radio duro y los demás blandos. Caudal truncada. Anal pequeña, precedida por dos espinas, de las cuales la primera está bien desarrollada. Dorso y flancos amarillo dorado, con estrías más oscuras, vientre blanco. Aletas también

amarillo dorado, más claras las pectorales y ventrales que las restantes.

La talla máxima observada en las costas bonaerenses es de 63 cm. Las más frecuentes en las capturas comerciales están entre 30 y 50 cm. Se reproduce en una amplia franja costera, desde la primavera hasta inicios del verano. La talla media de primera madurez sexual es de 34 cm en machos y de 36 en hembras.