La música interior

Por JOSE SUPERA
Escritor

Do.

Una música interior, una melodía que quizá todavía no aprendimos a escuchar, pero que está ahí, desde la creación de nosotros, desde la creación también de lo que conocemos como civilización. De acuerdo al modelo evolutivo actual, los primeros homínidos, usaban la polifonía (cantos polifónicos de muchas voces) como sistema de defensa ante el peligro. Hoy las tradiciones polifónicas están desapareciendo. Cada vez cantando más para nuestro interior, cada vez saliendo menos de nuestro agujero, como ahora, cuando usted se habla para adentro, replicando mi voz, pero que ahora es su voz, con una melodía única, que solo usted, en sus esfera más profunda, conoce.

Re.

Escúchese.

Escúcheme.

Escúchenos.

Mi.

Shaman Herrera es un músico y compositor de nuestra Ciudad. Sus creaciones parecen salir de una melodía interna, conectadas con su espíritu, pero también con su carne. En uno de sus videoclips cava un agujero en la tierra, y sobre el final de la canción, termina enterrándose para volver a renacer. Hablo con él para esta nota. Me encuentro en algún lugar sin espacio ni tiempo. Me/nos/se dice: “Los sonidos de la naturaleza son la música original del mundo. Ningún sonido me aleja: algunos me intrigan. Creo que algunas obras de arte adquieren algo similar porque el artista vuelca en ellas parte su propio ‘espíritu’, que vibra por simpatía con el espectador y es en esa conexión donde la obra cobra vida. El arte no va a cambiar el mundo. Hay una mente que vive para crear y que toma cualquier cosa que emita sonidos para hacer música. No hay lugar ni forma, están los límites que uno se autoimpone. Lo que busco es un viaje sonoro. Interno, eterno, instrospectivo”.

Fa.

El líder de la secta La Familia, Charles Manson, se obsesionó con la canción de los Beatles “Helter Skelter”. Se quedaba en su cuarto escuchándola una y otra vez hasta el amanecer. Decía que esa música pertenecía el diablo y que había sido escrita y tenía un mensaje –y con el mensaje, una misión– para él. Dejó entrar ese sonido en su cuerpo. La melodía en contacto con su espíritu se volvió odio, muerte. Ahora la música interior que cargaba su alma cargaba destrucción. Unas semanas después, su clan, su familia, se haría famosa por asesinar en su mansión de las colinas de Beverly Hills, a la famosa actriz Sharon Tate y algunos de sus amigos.

Sol.

Coco Fernández es vocalista y guitarrista de la banda platense Satélite Espía Ruso. Hablo de música interior para él prefiere hablar de música. “Para mí la música es una especie de lugar sin espacio ni tiempo, es algo que me genera muchísimo placer desde el momento que toqué un instrumento por primera vez, y por sobre todas las cosas es una herramienta para canalizar las cosas que siento, pienso, que vivo y viviré. Es una necesidad, una necesidad que va en busca de ser feliz o de al menos estar más cerca de eso. Considero que el arte es una de las síntesis más importantes de la especie. Encuentro en la música un refugio. Un lugar donde uno puede plasmar ideas, sensaciones, emociones sin prejuicios, y el hecho de poder compartir eso, eso que sólo era el comienzo de algo y que ahora es canción, que la tocás con la banda en vivo, que alguien la está escuchando en la radio, ya es algo increíble, mágico”.

La.

Y en Hungría, en 1933, alguien compuso una música mortal. En ese entonces sería llamada “Canción húngara del suicidio”. Ese alguien era Rezso Seress: músico experimental y depresivo y bohemio, que con su Szomorú vasárnap -o Gloomy sunday, o Domingo triste-, inspiraría a muchos jóvenes de la época a ponerle fin a sus vidas. La canción fue un éxito morboso y mundial. La reversionarían desde Bjork hasta Elvis Costello; la traducción en español la haría la argentina Mercedes Simone: pero Billie Holiday interpretaría la más desesperada y lúgubre de las versiones. Seress había compuesto el tema una semana después de la muerte de su prometida, en uno de los peores momentos de su vida: su obra cumbre sería cárcel y karma a la vez, lo condenaría al éxito y a la oscuridad. Por su condición de judío, sería golpeado y encarcelado por el régimen nazi. Unos años después estaría en un campo de concentración. Lo perseguirían comunistas. Pese a la fama y las regalías millonarias de su canción se volvería pobre. Pasó el último tramo de su vida tocando en tugurios por un plato de sopa. Hasta llegó a interpretar su Szomorú vasárnap en un circo de mala muerte acompañado por un organito de juguete. En enero de 1968 intentó el suicidio saltando por una ventana. Sobrevivió. Cuando recobró la conciencia y las fuerzas vitales, unos días después, se dio muerte ahorcándose con el alambre de su propia guitarra. Lo mataría su propia música.

Si.

DOMINGO TRISTE

(traducción del húngaro)

Un domingo triste te espero amada mía

con cien flores blancas

con una oración.

Una mañana de domingo,

mientras sueños buscaba

regresó sin ti la carroza de mis penas.

Desde entonces todos los domingos son tristes.

Las lágrimas son mi única bebida,

la pena es mi pan.

Triste domingo.

Último domingo, ven amada mía,

habrá catafalco, ataúd, velo mortuorio y un cura,

también te esperan flores, flores y ataúd.

Mi último camino es bajo un árbol florido.

Mis ojos estarán abiertos para verte una última vez.

No tengas miedo de mis ojos, que muerto también te bendigo.

Último domingo.