Estimado lector, muchas gracias por su interés en nuestras notas. Hemos incorporado el registro con el objetivo de mejorar la información que le brindamos de acuerdo a sus intereses. Para más información haga clic aquí

Enviar Sugerencia
Conectarse a través de Whatsapp
Temas del día:
Buscar
Séptimo Día |TENDENCIAS

Eslovenia: La Gruta de Postojna, el Castillo Escondido y el Caballero Erasmo

1 de Febrero de 2015 | 00:00

Por SILVANO K. TREVISAN
Ingeniero

Eslovenia. Poco conocido, pero interesante país de los Balcanes. Uno de los de menor superficie de Europa: es la mitad de Suiza y algo menor que nuestro Tucumán. Su población -2 millones de habitantes- es la cuarta parte de la vecina Austria y apenas superior a la de Letonia. Luego de la 1ª Guerra Mundial, su litoral Sud-Oeste –por donde transitarán estos comentarios de viaje- perteneció a Italia (entre 1918 y 1945). Después, pasó a ser parte de la nueva República de Yugoeslavia, de la que se independizó en 1991, sin disparar un solo tiro. Hoy, es un país moderno, pacífico y culto, con innumerables castillos medievales, verdes prados, bosques cuidados, pequeños y luminosos lagos, centenares de grutas y cuevas, múltiples leyendas e iglesias que nos hablan de siglos. Y una ciudad capital –Ljubljana- donde se conjugan, armoniosamente, su rico pasado histórico con un presente renovado. Si a ello sumamos un pueblo de carácter abierto y amistoso, nos sentiremos dentro de un escenario placentero y fácilmente querible. Eslovenia: por algo lleva en medio de su nombre, la palabra “love”. Mucho se puede escribir sobre ella. Aquí, sólo narraremos tres experiencias relevantes.

LA GRUTA DE POSTOJNA

Sin pretender restarle méritos a otras atractivas cuevas dispersas por nuestro planeta, la gruta de Postojna está entre las más espectaculares y alucinantes. Tiene unos 20 Km de desarrollo, embellecidos con un desfile incesante de galerías, túneles y cavidades que, en algunos casos, superan la altura de un edificio de 10 pisos. Se descubrió hace unos 800 años y está abierta al público desde hace 200. Algunos datos curiosos: la luz eléctrica se instaló en su interior antes que en la ciudad capital, y en las dos últimas Guerras Mundiales fue testigo y protagonista destacada como prisión de soldados rusos, en la Primera, y como teatro de una dura batalla entre partisanos (guerrilleros locales) y nazis, en la Segunda.

Se estima que esta gruta se originó hace unos 70 millones de años. El medio dentro del cual se desarrolla se denomina, geológicamente, “karst”, roca típica de la región italo-eslovena, caracterizada por su alto contenido de carbonato de calcio soluble en agua, la cual, al infiltrarse, arrastra otros minerales y los deposita, lenta pero constantemente, en forma de estalactitas (cuelgan del techo de la cueva) y sus conjugadas, las estalagmitas (crecen desde el piso), las cuales, al encontrase luego de mucho, mucho tiempo, forman una esbelta columna, generalmente estriada, momento a partir del cual comienza a incrementar su diámetro. En escenarios kársticos como este, la velocidad de crecimiento de estas formaciones pétreas es del orden de 1mm por año, lo que significa que se requieren nada menos que mil años para un desarrollo de un metro.

Pose pequeños arroyos que forman pintorescos laguitos antes de infiltrarse en busca de mayores profundidades. Allí reside el Proteo, o ”pez humano”, rarísimo ejemplar que los biólogos consideran prehistórico, de unos 20 a 30 cm de largo, piel rosada como la nuestra y cortas extremidades superiores (con dedos) e inferiores, que lo asemejan a una lagartija o a un pequeño reptil. Tiene una vida media de 100 años y sólo existe en sitios oscuros como una cueva. Y para que su presencia sea aún más dramática, se trata de un animal ciego en razón de que nunca, en toda su historia, ha visto la luz. En sus proximidades no hay iluminación; tampoco se permite el uso de flash.

La gruta se recorre, parcialmente, en un trencito eléctrico en los primeros 30 minutos, y a pié durante la hora final. El trayecto permite disfrutar de un desfile continuo de figuras y formaciones de deslumbrantes colores que parecen salir de la manga de un ilusionista y que no se ven en ninguna otra gruta de Europa. Particularmente atractivas son: La Sala Gótica, con sus rocas abiertas en forma de arco ojival; La Sala de los Espaguetis, donde penden del techo millones de estalactitas muy delgadas de aspecto similar a las populares pastas italianas, formando una densa cortina; El Puente de los Rusos, construido a caballo de un aterrador precipicio por los prisioneros de ese país; El Baldaquino, especie de pétreo dosel curvo color marrón; etc.

Pero la mayor atracción corresponde a la increíble Sala de Conciertos: un amplio y muy alto espacio, con capacidad para 2.000 personas de pié, donde es posible asistir a una conferencia o disfrutar de un concierto en un inusual “teatro” cuya acústica nada tiene que envidiar a la del Covent Garden, ni a la de Alla’Scala, ni a la del Colón, y donde pudimos escuchar a la Filarmónica de Ljubljana interpretando el bello Intermezzo de Cavalleria Rusticana de Pietro Mascagni. ¡E poi morire!

En síntesis: la Gruta de Postojna constituye un sorprendente paseo convertido en un show geológico de ciencia ficción multicolor, polifacético y alucinante.

EL CASTILLO DE PREDJAMA

En esloveno “pred” significa castillo y “jama” cueva. Por lo tanto su nombre puede traducirse como “Castillo en una Cueva”. Europa está sembrada de majestuosos castillos y cada uno muestra una particularidad. El de Predjana se distingue por ser una colosal construcción de piedra erigida en la boca de ingreso a una enorme gruta, a sólo 10 km de la de Postojna.

Un estrecho precipicio de 125m de profundidad delante de la cueva, con un arroyo en el fondo, y su aspecto de nido de cóndores, lo hacen prácticamente inexpugnable. La primera fortaleza en ese sitio se edificó allá por los 1200, pero la actual es de 1570 y la construyó un rico noble austríaco. Pasó luego por varias manos, ilustres y plebeyas, todas las cuales se ocuparon de restaurarlo hasta darle el aspecto que hoy contemplamos. Fue confiscado durante la 2ª Guerra Mundial, pasando luego al poseedor actual: la Empresa Postojnska Jama, que lo gestiona turísticamente.

El hecho de tener a sus espaldas un túnel oscuro con un pasadizo oculto que conectaba secretamente con el exterior, daba al castillo una importante ventaja estratégica ante un eventual ataque, y al ejecutarse con la misma piedra kárstica que lo rodea se mimetiza con el entorno natural, aumentando así el misterio de su inquietante presencia. Es posible visitarlo; sólo se requiere un poco valentía y no tener miedo a la altura. Al recorrer su interior, donde algunos de sus muros se confunden con la misma roca, uno puede intuir cómo era allí la vida en el medioevo: indudablemente segura, pero al mismo tiempo monótona, insalubre e incómoda.

Imponente, provocador e imposible de conquista, su atracción no se debe únicamente a su espectacular emplazamiento. Es que, además, fue escenario de disputas, de románticas leyendas y, desde 1483, escondite preferido del legendario, rebelde, intrépido y obstinado Caballero Erasmo.

EL CABALLERO ERASMO

La historia lo recuerda como el Barón Erasmus Lueger; otros lo llaman Erazem de Predjama. La leyenda lo denomina, simplemente, El Caballero Erasmo. Era un típico hombre de montaña; de fuerte contextura y temperamento, atractivo, inflexiblemente fiel a su amigos y exitoso Don Juan. Dado que robaba a los ricos para dar a los pobre, en su país lo llaman el Robin Hood Esloveno, por su accionar semejante al del héroe y bandolero ídolo medieval inglés.

Era hijo del gobernador de Trieste, quien pertenecía a la reinante dinastía austríaca de los Habsburgo, cuyo emperador era entonces Federico III (1415-1493). Esto le creó a Erasmo un dilema político pues él simpatizaba más con Matías Corvino (1443-1490), soberano de Hungría y adversario de Federico.

Según el relato, Erasmo mató a un miembro de la corte de Viena que había mancillado el honor de uno de sus amigos. Para su desgracia, la víctima resultó pariente de Federico, quien ordenó la inmediata captura del homicida y su posterior ejecución. Erasmo huyó por los bosques y montañas de Eslovenia, sin que pudieran prenderlo, protegido por los pobres a los que había ayudado. Finalmente, se refugió en el Castillo de Predjama junto a un grupo de sus seguidores y novias. Por largo tiempo, las fuerzas del Emperador asediaron el castillo tratando de hacerlo morir de hambre; pero fracasaron. Erasmo tenía comida fresca todos los días, que le proveían a través del túnel secreto existente en la parte posterior de la gruta.

Pero cuando se cumplía un año y un día del sitio, uno de sus sirvientes, sobornado por el ejército imperial, lo traicionó. Con una bandera, colocada en el momento preciso, indicó el lugar en que Erasmo utilizaba el sanitario, situado en la parte superior del castillo –único punto expugnable de la fortaleza-, y un certero cañonazo lo mató.

Según se cuenta, el Caballero Erasmo está enterrado en un patio exterior del castillo, cerca de una pequeña capilla gótica del S.XV, sitio donde hoy crece un tilo enorme plantado en su memoria por su última novia.

Una vez más, el mito se superpone a la historia.

Las noticias locales nunca fueron tan importantes
SUSCRIBITE

ESTA NOTA ES EXCLUSIVA PARA SUSCRIPTORES

HA ALCANZADO EL LIMITE DE NOTAS GRATUITAS

Para disfrutar este artículo, análisis y más,
por favor, suscríbase a uno de nuestros planes digitales

¿Ya tiene suscripción? Ingresar

Básico Promocional

$120/mes

*LOS PRIMEROS 3 MESES, LUEGO $1870

Acceso ilimitado a www.eldia.com

Suscribirme

Full Promocional

$160/mes

*LOS PRIMEROS 3 MESES, LUEGO $2880

Acceso ilimitado a www.eldia.com

Acceso a la versión PDF

Beneficios Club El Día

Suscribirme
Ir al Inicio
cargando...
Básico Promocional
Acceso ilimitado a www.eldia.com
$120.-

POR MES*

*Costo por 3 meses. Luego $1870.-/mes
Mustang Cloud - CMS para portales de noticias

Para ver nuestro sitio correctamente gire la pantalla