Cierran el cerco a un bastión clave del Isis

BAGDAD.- Las fuerzas iraquíes continúan estrechando el cerco a Tikrit, capital de Saladino, localidad estratégica en poder de los terroristas del grupo Estado Islámico (ISIS, según sus siglas en inglés), confirmó un responsable provincial.

El presidente de la Comisión de Seguridad de la provincia de Saladino, Yasem al Yabara, aseguró que tropas leales al gobierno de Bagdad han recuperado el pozo petrolero de Alás, situado al este de la localidad de Al Alam, 15 kilómetros al norte de Tikrit.

El responsable detalló que fuerzas del Ejército regular habían logrado también expulsar a los combatientes del ISIS de esta localidad en su avance hacia Tikrit.

Los militares también recuperaron el control de la aldea de Al Maabdi, en la comarca de Al Alam, así como de la carretera que une Kirkuk con Tikrit, una importante vía de abastecimiento de los yihadistas.

Según Al Yabara, las tropas gubernamentales podrán completar el cerco a Tikrit en las próximas horas o días si continúan los progresos de los combatientes, quienes están siendo apoyados por la aviación iraquí.

Al Yabara destacó el importante papel de los bombardeos aéreos en los combates de la jornada de ayer, al haber golpeado centros y concentraciones terroristas de “Daesh” (como se conoce al ISIS en árabe).

Durante la mañana de ayer, las fuerzas iraquíes habían recuperado el control de la localidad de Hamarin y de otras aldeas en el norte de la provincia de Saladino.

Una fuente de la Policía informó que durante las operaciones en estas zonas resultaron muertos al menos 18 yihadistas, entre ellos dos que intentaron perpetrar atentados suicidas, que afectaron el avances de las tropas oficiales. La conquista de Hamarin, a unos 25 kilómetros al norte de Tikrit, es relevante debido a que es una zona montañosa en la que los extremistas tienen escondites y campos de entrenamiento.

Tikrit, cuna del fallecido dictador Saddam Hussein y principal blanco de la ofensiva lanzada el lunes está casi rodeada por las fuerzas leales al gobierno iraquí.

Esta ofensiva militar de gran envergadura, en la que además de tropas regulares participan milicianos afines al gobierno, comenzó desde cinco ejes, con el objetivo de expulsar al ISIS del norte de Saladino y recuperar Tikrit. La situación geográfica de Saladino, entre Bagdad y Nínive, cuya capital es Mosul, principal feudo de los extremistas en Irak, le otorga una gran importancia estratégica.

NUMEROSAS BAJAS

En tanto, se supo ayer que la coalición militar encabezada por Estados Unidos en Irak ha matado a más de 8.500 combatientes del ISIS desde que empezó su ofensiva aérea en agosto y ha empezado a prevalecer, afirmó el martes el general que lidera la coalición.

El general Lloyd Austin, comandante de Comando Central Estadounidense, aseguró que el ISIS ya no es capaz de conquistar y ocupar nuevos territorios.