El Papa llevará al país azteca un mensaje de paz

La visita de Francisco a México, la primera que realiza como Papa al país latinoamericano, busca dar un mensaje de esperanza frente a la violencia del narcotráfico, el aumento de las desapariciones y el drama de miles de personas que dejan sus países en busca de oportunidades en EE UU. Jorge Mario Bergoglio estará en el país del 12 al 17 febrero y, a diferencia de las visitas de sus antecesores, incluyó en su recorrido seis ciudades para enviar un mensaje inequívoco sobre los temas que le preocupan.

La violencia, la corrupción, el narcotráfico y la trata de personas son algunos de los males que sufre el país y que Francisco no pasará por alto. “No quiero tapar nada de eso” en México, el segundo país con más católicos del mundo, pero que atraviesa una crisis de fe que solo se resolverá si busca soluciones a los conflictos, afirmó esta semana.

El semanario católico mexicano Desde la Fe indicó en un reciente editorial que el pontífice “estará en lugares violentos, pobres y miserables del país, y los gobernantes no pueden tapar el sol con un dedo”. “La basura permanece debajo de la alfombra roja, y Francisco no vendrá” a buscar ni “los papelitos de colores” ni “la retórica estéril”, señaló el artículo.

Desde fines de 2006, cuando el entonces presidente Felipe Calderón lanzó una lucha frontal contra los cárteles de la droga, la violencia del crimen organizado ha dejado más de 150.000 muertos y unos 26.000 desaparecidos. Entre ellos están los 43 estudiantes que desaparecieron en septiembre de 2014 a manos de policías corruptos y miembros del crimen organizado, cuyos padres han pedido una reunión con el Papa.

El abogado de los familiares, Vidulfo Rosales, expresó que es “complicado” el encuentro, algo que ya buscaron durante la visita papal a EE UU, pero consideró que todavía hay una “oportunidad” de que se concrete durante la estadía de Francisco en Ciudad de México. La violencia también ha golpeado a los sacerdotes: once de ellos fueron asesinados en la actual administración del presidente, Enrique Peña Nieto.