Arroyo Salgado, con nuevos peritajes “A Nisman lo mataron”

La jueza federal de San Isidro Sandra Arroyo Salgado, querellante en la causa por la muerte de su ex marido Alberto Nisman, denunció ante la Justicia que el fiscal de la causa AMIA fue víctima de un “magnicidio de proporciones desconocidas que merece respuesta de las instituciones de la República”.

Lo hizo al presentar las conclusiones a las que llegó su importante equipo “interdisciplinario” de asesores que analizaron las fotos del hallazgo del cadáver, las imágenes de la autopsia y los resultados de los peritajes que constan en la causa.

Con la difusión de sus conclusiones, Arroyo Salgado dio por tierra con la investigación que está llevando la fiscal Viviana Fein, intentando demostrar -dijo- “un suicidio”. “Lógicamente que el suicidio que se pretende comprobar no podrá ser acreditado por la simple razón que Alberto Nisman no se suicidó: a Alberto Nisman lo mataron”, sostuvo la funcionaria judicial en una exposición que brindó, junto a sus asesores, en el teatro del “Viejo Concejo”, a metros de la Catedral de San Isidro.

Enterada de esas palabras, la fiscal Fein reapareció ante la prensa: admitió disidencias entre los peritos oficiales y pidió prudencia para hablar de homicidio (ver pág. 5).

Arroyo Salgado, quien ya con anterioridad ha hecho públicas diferencias con Fein, apuntó que la fiscal “no ha podido comprobar la única hipótesis que vino encarando. El suicido no puede ser acreditado por la simple razón de que Nisman no se suicidó sino que lo mataron”.

La madre de las hijas del fiscal presentó las conclusiones que le acercaron los expertos de su equipo: el defensor público oficial Germán Carlevaro -querellante en nombre de las hijas y la madre del fiscal-, los médicos forenses Osvaldo Raffo y Julio Ravioli y el licenciado en criminalística Daniel Salcedo.

hubo agonia

Al fiscal de la causa AMIA lo “mataron en la noche del sábado 17 de enero y no a las 15 del domingo 18 como estableció la autopsia oficial”, un trámite al que se le impidió participar a la familia del funcionario fallecido pese a los numerosos llamados a las autoridades nacionales y judiciales, denunció Arroyo Salgado.

Según precisó, “la data de la muerte” fue “36 horas” previas a la autopsia (con un lapso de diferencia de 4 horas más/menos), practicada entre las 8 y las 10 del lunes 19. Además, sostuvo la jueza, “el cuerpo se manipuló” y “hubo agonía” por parte de la víctima porque “no existió espasmo cadavérico” en la mano derecha -signo de que habría accionado la pistola- lo cual se contradice con la pericia oficial.

El disparo mortal se concretó con la pistola calibre 22 que le prestó el técnico Diego Lagomarsino: se produjo un tiro “de derecha a izquierda, de abajo hacia arriba y de atrás hacia adelante” que le fue efectuado a 3 centímetros sobre la oreja, se explicó.

Remarcó además que su ex marido no estaba borracho al momento de morir, como había deslizado un día antes la agencia de noticias Infojus, del Ministerio de Justicia: “La pericia toxicológica mostró cafeína y alcohol en mínima cantidad. Es decir que los trascendidos públicos que afirman que Nisman estaba alcoholizado el momento de su fallecimiento no son certeros”, afirmó.

respuestas de las instituciones

“Por todo esto, quiero trasmitir que: Nisman no sufrió un accidente, Nisman no se suicidó. A Nisman lo mataron y su muerte es magnicidio de proporciones desconocidas que merece respuestas de parte de las instituciones de la República. Y nuestro compromiso como familia y el mismo como miembro del Poder Judicial de la Nación es para que se pueda llegar a la verdad”.

“Sigo pidiendo a todos, sea cual sea el lugar que ocupan, respeto, prudencia y ética profesional en el tratamiento del caso”, concluyó.