El dólar gana por varios cuerpos a la hora de elegir cómo pelearle a la inflación

La fiebre por el dólar parece no tener límite. Los argentinos con poder de ahorro, aquellas familias consideradas clase media que pueden guardar algo de lo que ganan mensualmente, se refugian en el dólar, aseguran los economistas y lo confirman la demanda récord de la compra de moneda extranjeras que habitualmente da a conocer la Afip.

Las atractivas tasas de interés que ofrecen los plazos fijos en las entidades bancarias, que alcanzan al 26,14% anual, no pudieron hasta el momento evitar la demanda del billete estadounidense; si bien hasta abril la gente se volcó a esta alternativa de ahorro en pesos, ahora prefiere deshacerse de ella, advierten los especialistas.

En cambio, con el Boden 2015 pasa todo lo contrario, la demanda crece sin pausa; este bono del Gobierno permite comprar láminas en pesos y cobrarlas en octubre, a su vencimiento, en dólares. Por eso hoy resulta una posibilidad que los ahorristas ven potable para resguardar su dinero de los efectos inflacionarios.

El valor de la lámina del Boden 2015 es actualmente de 1431,50 pesos (187 pesos más de lo que valía en junio, cuando se cotizaba a 1.244 pesos), y se pagará por cada lámina en octubre 103,50 dólares.

Los planes de ahorro para la compra de autos 0 Km es otra de las formas que ha crecido en los últimos meses y a la que apuestan las familias para escaparle a la inflación (ver aparte); y también están aquellos que se suman a proyectos inmobiliario con la modalidad del pozo -significa comprar un departamento antes o en el comienzo de la construcción del edificio- con una inversión inicial que podría ser de 200 mil pesos y luego cuotas a convenir que no superen los 3.000 mensuales.

Más allá de una u otra forma de ahorro, hay algo que el especialista Martín Tetaz asegura que no hay que hacer: “quedarse con los pesos en la mano”. Según el economista, “quienes pueden acceder al dólar ahorro lo están haciendo de manera masiva”, y eso lo atribuye a la posibilidad concreta de una devaluación luego de las elecciones de octubre. “Y si no pueden comprar dólar ahorro con autorización de la Afip, la gente busca hacerlo por otros medios, a través del Boden 2015 o bien recurriendo al mercado informal o paralelo”

Hay un dato clave. Quienes compraron dólares en el mercado informal en marzo pasado, lo pagaron 12,68 pesos y el último viernes cerró a 15,55 pesos. O sea que si aún los conservan, ya ganaron en cinco meses 2,87 pesos por dólar, y en 100 dólares 287 pesos.

DEMANDA RECORD

La tendencia del ahorro en billetes estadounidenses se observa claramente en la creciente demanda que da a conocer la Afip del dólar ahorro cuyo valor hoy se ubica en 11,16 pesos (9,30 pesos más el 20% de recargo).

La compra de moneda extranjera para tenencia personal alcanzó el viernes pasado a 655,8 millones de dólares en lo que va de agosto, 25 millones menos que el récord cuando resta el día de hoy para la finalización del mes (ver gráfico).

Incluso algunos economistas advierten que el dólar ahorro le puede llegar a ganar la carrera al consumo, que “podría frenarse si la gente se sigue volcando al billete verde por considerarlos barato”, indican especialistas de la consultor Abeceb.

PLAZO FIJO

Los depósitos en plazo fijo aumentaron considerablemente en abril, pero ahora, cerca de las elecciones “han bajado porque la gente ha preferido deshacerse de ellos para refugiarse en otras formas de ahorra. Concretamente buscan dolarizarse ante los rumores de devaluación del peso después de las elecciones”, coinciden los economistas.

De todas formas muchos todavía lo ven como una alternativa, al menos para que los pesos no pierdan ante la inflación.

Las tasas rondan el 26% anual tanto en entidades bancarias públicas como privadas. Un ejemplo sería entonces: si un inversor deposita 50.000 pesos a 60 días (2 meses), con una tasa del 24% anual (2% mensual), al vencimiento recibirá los 50.000 pesos más 2.000 pesos (4%) de intereses ganados. Si el depósito de los 50.000 es a un año, la cifra entonces al vencimiento será de los 50.000 más 12.000 pesos de interés (siempre con una tasa del 24% anual, aunque algunas propuestas llegan al 26%).

En las primeras jornadas de junio parecía confirmarse el quiebre de tendencia que se insinuó en mayo: la adquisición de dólar ahorro venía en caída, tras haber arrancado el 2015 con un fuerte impulso, según mostraban las estadísticas oficiales. Al mismo tiempo, desde abril a esa parte del año el BCRA daba cuenta de un crecimiento acelerado de los depósitos a plazo fijo -que ahora se revirtió- y los especialistas atribuían ese fenómeno a “que las expectativas de devaluación fueron congeladas”.

Según datos del Banco Central (BCRA) al 17 de abril, el incremento interanual del total de los depósitos a plazo fue de 20,9%, mientras que el aumento correspondiente al sector privado fue del 32,6%. De esta manera, el crecimiento acompañó a la inflación del último año, ya que los cálculos privados ubican al índice de precios en el 31%. No obstante, desde mediados de junio a esta parte, la tendencia se revirtió y la demanda del dólar ahorro es la preferencia de los ahorristas, concluyen los especialistas consultados.