Brad no firmó el divorcio

La fecha para entregar los documentos de divorcio llegó y pasó, y Brad Pitt no estampó la firma, generando todo tipo de especulaciones: ¿empieza la guerra o se trata de un intento por pacificar la situación de parte del galán?

Desde el entorno, afirman que la opción correcta es la segunda: a pesar de numerosos reportes de que el actor atraviesa una profunda crisis y no quiere divorciarse, mientras que la actriz está decidida a cortar todo lazo con Pitt, lo cierto es que, perdido por perdido, el actor estaría buscando una resolución amigable y lejos de los medios y la esfera pública.

Pitt tenía hasta el pasado 20 de octubre para contestar a los papeles de divorcio presentados por Jolie el 19 de septiembre: pero responder a aquella petición donde la morocha pedía por la custodia de los hijos, implicaría presentar una alternativa para la custodia de las criaturas fruto de su década de amor, comenzando así una larga batalla legal que, seguramente, habría afectado a los chicos.

Pitt, desde el inicio, lamentó el carácter público que dio Jolie al divorcio, y ahora intentará llegar a un acuerdo privado en la situación de la custodia de los hijos de la pareja, la única complicación verdadera en su separación, ya que ambos habían firmado acuerdos prenupciales donde dividían los bienes equitativamente en caso de divorcio.

EL OTRO DRAMA

Pero un arreglo privado por la custodia significaría apenas un problema menos para Brad, que todavía tiene que lidiar con el Departamento de Servicios Sociales, que lo investiga por el maltrato de su hijo mayor, Maddox.

En medio del divorcio y la investigación, Pitt solo tiene acceso a sus hijos con visitas supervisadas, aunque desde el incidente que sostuvo con Maddox en un avión privado en el que viajaba toda la familia, que precipitó el divorcio, Pitt no lo había vuelto a ver hasta el viernes por la tarde, en una cita supervisada por un terapeuta.

Pitt y Jolie, en tanto, no han vuelto a estar en contacto desde la presentación de la demanda de divorcio.