Los olvidos: ¿señales de un mal neurológico o cosas de la edad?

En la gran mayoría de los casos, las demencias seniles se diagnostican cuando lo cuadros se encuentran ya muy avanzados; y la principal causa de ello es que sus síntomas más evidentes, la pérdida de memoria y el deterioro de ciertas habilidades sociales, suelen ser tomados al principio como cosas propias de la edad. Para salvar ese escollo que termina conspirando contra la calidad de vida muchas personas mayores, investigadores de la Clínica Mayo establecieron una serie de indicadores que permitirían detectar precozmente cuándo los olvidos podrían ser indicios de una posible enfermedad.

“La detección temprana de personas con un mayor riesgo de desarrollar problemas cognitivos y de memoria, lo que se denomina deterioro cognitivo leve, resulta crucial para anticiparse a la demencia y poner en práctica algunas medidas preventivas”, explican los responsables del estudio, publicado por la revista científica Neurology.

Para desarrollar un test que cumpla esa finalidad, los investigadores norteamericanos reunieron al azar a 1.449 personas de entre 70 y 89 años sin problemas cognitivos aparentes y las sometieron a una batería de pruebas de memoria y pensamiento en forma regular a lo largo de los cinco años que duró la investigación.

La diabetes, la salud cardiovascular, la depresión y los trastornos de ansiedad también incidirían sobre el riesgo de desarrollar una demencia senil

De esta forma, en base a ciertas características en común presentadas por los 401 pacientes que terminaron desarrollando trastornos cognitivos leves, los autores del estudio crearon un sistema de puntuación para determinar riesgo de demencia. Entre los factores tenidos en cuenta se encuentran tanto los años de educación, el número de medicamentos ingeridos y los antecedentes de accidente cerebrovascular, diabetes y tabaquismo, como los síntomas de depresión y ansiedad.

A cada uno de los parámetros observados, los investigadores les asignaron una puntuación en función de cuánto contribuirían al riesgo de desarrollar problemas cognitivos; por ejemplo, ser diagnosticado de diabetes antes de los 75 años aumentaba la puntuación en 14 puntos, mientras que tener 12 o menos años de educación incrementaba el riesgo en dos puntos.

Lo curioso es que los factores predictivos, como observaron los investigadores, resultaron ser diferente para el hombre y la mujer. Y es que si bien el riesgo de deterioro cognitivo leve aumenta con la edad en general, los varones más jóvenes parecían tener un mayor riesgo que las mujeres más jóvenes: y por el contrario, las mujeres mayores tendrían un riesgo más elevado que los hombres de su edad.

Pero lo cierto es que otras variables como la diabetes, la salud cardiovascular, la depresión y los trastornos de ansiedad también incidirían sobre el riesgo de desarrollar una demencia senil.

Con todo, el propósito del trabajo no fue crear una herramienta de diagnóstico sino “una forma barata y fácil de identificar a las personas que deberían ser remitidas a pruebas más avanzadas para determinar posibles trastornos”, aclaró el doctor Ronald Petersen, uno de los principales responsables de la investigación.

SOLO INDICADORES

“En nuestro país disponemos de varios test similares al descripto en el estudio”, señala el doctor Diego Sarasola, especialista en Neuropsiquiatría y director del Instituto de Neurociencias Alexander Luria, quien asegura que a medida que la población envejece resulta cada vez más importante dotar de este tipo de herramientas a los médicos clínicos, que es a donde los pacientes suelen consultar la primera vez.

Sin embargo “es importante tener en cuenta que estos tests sólo sirven para detectar a aquellas poblaciones con mayor riesgo de desarrollar demencia a fin de enfocarlas y estudiarlas con mayor cuidado -aclara el médico-. Porque si bien existen ciertas características que indican cuándo una falla de memoria debe empezar a preocuparnos, éstas tiene un valor orientativo y no constituyen de ningún modo un diagnóstico. Por eso, no hay que alarmarse ante la presencia de algunos de esos indicadores sino consultar a un especialista”.