Apuran proyecto para sanear, en un año, la cantera de Hernández

Convertidas en un basural a cielo abierto como consecuencia del vuelco clandestino de residuos, las cavas situadas entre 25, 31, 514 y 517, en la localidad de Hernández, serán sometidas a un plan de saneamiento y rehabilitación, a partir de un acuerdo técnico que firmaron la Comuna y la Universidad Nacional y cuyos detalles trascendieron en las últimas horas.

El acuerdo, que forma parte de un plan integral de recuperación de canteras, apunta a la puesta en marcha de un estudio interdisciplinario que permita elaborar una estrategia para la limpieza y refuncionalización del basural que a mediados de abril pasado ardió durante una semana entera, intoxicando el aire de Hernández, Tolosa, Gonnet, La Granja y parte del casco urbano platense.

El destino del predio, una vez recuperado, aún no ha sido definido. Está previsto consultar a los vecinos de la zona para resolver si será convertido en un espacio verde o será destinado a otro fin.

EL PROYECTO

El plan de recuperación del mencionado espacio consta de dos fases, que deberán estar concluidas al cabo de once meses, aunque el plazo puede ser prorrogado.

La primera fase, se explicó, es de “aplicación inmediata”, y busca evitar la disposición de residuos que se viene realizando hasta el momento.

Precisamente, esta fase implica la clausura definitiva de la cantera. Incluye un relevamiento y registro de la situación en el predio; un análisis del desarrollo del basural a través de imágenes satelitales; evaluación de la situación general, caracterización ambiental del predio, usos actuales, ingresos; y un muestreo de antecedentes similares en la Región.

Con ese fin, ya se tomaron medidas para restringir el ingreso de residuos. Por empezar, se limitó la entrada de vehículos mediante el refuerzo de la vigilancia, la colocación de un cerco perimetral y la instalación de cartelería. También se iniciará la extracción de residuos superficiales y la disposición final según su tipología.

Esta etapa, indicaron, debería estar concluida en un plazo de 60 días.

En tanto que la segunda fase -dividida a su vez en distintas etapas- apunta a las tareas para sanear y rehabilitar las canteras y deberá estar concluida en 330 días.

Entre otras acciones se realizará una recopilación y análisis de antecedentes ambientales del predio y su entorno; una evaluación de la legislación aplicable y de la situación catastral de los lotes.

Asimismo, en esta fase se dará inicio a los estudios hidrogeológicos y se hará consultas a actores locales para conocer los antecedentes de las cavas y sus expectativas de rehabilitación. Esto significa que “se discutirá con los vecinos los usos y espacios a definir”.

También contempla medidas a largo plazo relacionadas con el tratamiento de áridos y restos de poda; rehabilitación de canteras y fortalecimiento de cooperativas de reciclaje, de acuerdo a las normas del sistema de Gestión Integral de Residuos Sólidos Urbanos.

Cada una de estas acciones, se informó, se llevará a cabo en articulación con el Organismo Provincial de Desarrollo Sustentable (OPDS), que dará la convalidación formal a las actividades propuestas; la Ceamse, que se supone será el receptor final de los residuos que cumplan con sus criterios de aceptabilidad y con Operadores de Residuos Especiales, en caso de ser necesario.

Según se desprende de la letra del convenio, la Municipalidad se compromete a colaborar con personal de la casa de altos estudios, “a los efectos de facilitar el ingreso al predio, realizar las observaciones necesarias (incluyendo la seguridad del personal), así como para la toma de muestras, lo que puede requerir el uso de maquinarias y operarios”.

Por su parte, la UNLP se ocupará de realizar los “informes preestablecidos, a los efectos de anoticiar a la Municipalidad de los avances en el desarrollo de la estrategia para el saneamiento y rehabilitación del basural”.

HUMO INTENSO

Mientras avanza el proyecto de saneamiento, en Hernández los vecinos siguen con problemas. Es que esta semana frentistas de 514 y 29 denunciaron que “casi todas las noches” desconocidos prenden fuego la basura depositada en un amplio contenedor, lo que genera una intensa humareda negra que invade todos los rincones del barrio. Anteanoche, dijeron, un nuevo incendio de estas características hizo que el humo se filtrara en decenas de viviendas, lo que les impidió dormir en toda la madrugada. “En el barrio hay gente asmática y esto es muy perjudicial para la salud”, dijeron los frentistas, quienes denunciaron que “limpian el lugar y enseguida viene gente de otras zonas a arrojar los residuos”.