Artistas juntan firmas por el enrejado del Argentino

En rechazo a la construcción de un vallado de 400 metros alrededor del Teatro Argentino, vecinos, artistas y activistas se congregaron ayer en la esquina de 51 y 9, donde invitaron a la gente a firmar el petitorio que entregarán a las autoridades del edificio para pedir que se frene la medida.

“#Teatro Argentino Sin Rejas” fue la consigna que durante la tarde del sábado reunió a cientos de personas en un intento por convencer a las autoridades del coliseo platense para que se detenga la construcción del enrejado que hace dos semanas comenzó a erigirse sobre la vereda de 53.

“Somos un grupo de gente autoconvocada, del campo de las artes, vecinos, trabajadores de la cultura, que venimos con la propuesta del Teatro Argentino sin rejas”, explicó Alejandro Meitin, artista y activista.

Desde las 16, hora de inicio de las actividades, un gran número de personas comenzó a arribar al lugar de encuentro, en su mayoría artistas y trabajadores de la cultura, pero también hubo una fuerte presencia de los vecinos que se acercaron para expresar su rechazo a la medida.

“Creemos que este trabajo de enrejamiento tiene un impacto de profunda negatividad en el uso que la comunidad hace del espacio público, en especial los jóvenes que encuentran en este lugar un espacio de pertenencia, sociabilidad e identificación”, expresaron los impulsores de “#TeatroArgentinoSinRejas” a través de su página en Facebook.

En los últimos años, la “plaza seca” que rodea la manzana se ha convertido en un sitio de encuentro para un variado número de tribus urbanas que lo han convertido en un referente más de la cultura popular.

Grupos como “Skate Drámatico”, “BiciDanza” y “La Plata Rollea” suelen utilizar ese espacio para realizar actividades.

Por su parte, en un comunicado oficial, los directivos del Teatro Argentino justificaron la medida en “la sucesión de hechos vandálicos que viene sufriendo el edificio”, que han incluido la destrucción de luminarias, escaleras, vidrios y el pintado de las paredes y pisos con grafitis.

Por estas razones, y asegurando que en un intento por “revertir una práctica ya instalada” se realizaron infructuosas reuniones con skaters, grafiteros y tribus urbanas, las autoridades a cargo del Teatro se decantaron por la construcción de una protección perimetral de 400 metros sobre la línea municipal.

Aunque de día el acceso al espacio público continuará siendo irrestricto, tras la hora de finalización de actividades en el edificio cultural, los puntos de acceso quedarán cerrados con la consecuente imposibilidad de hacer uso del espacio público actualmente utilizado por cientos de jóvenes.

“Si hay conflictos hay que resolverlos entre todos”, expresó Matías López entre las personas convocadas ayer, y agregó que “si se enreja cada espacio que queremos proteger, nos quedamos sin espacios públicos”.

Con intervenciones de “Arte al Ataque”, “Hagamos lo Imposible”, la presentación de bandas musicales y participaciones de agrupaciones artísticas y vecinales, se invitó a la gente a firmar el petitorio que actualmente lleva ya alrededor de 2 mil adherentes.

“Es momento de repensar el espacio público, de una forma más creativa, e incluir a los vecinos en la toma de decisiones”, concluyó López.