Caótico regreso a la rutina con protestas y embotellamientos

El regreso a las actividades tras las vacaciones de invierno fue un caos en la Ciudad: cortes de tránsito por marchas y accidentes, colas en los cajeros para retirar dinero, pasajeros varados en las paradas habituales del microcentro y diversas complicaciones que reaparecieron en las inmediaciones de los co legios privados que volvieron a clases, conformaron un lunes para olvidar.

A media mañana, quienes circulaban por 12 y 54 se encontraron con un piquete de la Federación Argentina de Cartoneros y Recicladores, que pidió una entrevista con autoridades municipales para que “terminen los operativos de secuestro de animales y de la mercadería que se consigue en las recorridas por distintos barrios”, según dijo Rodrigo Hernández, referente de la organización en La Plata -ver aparte-.

Mientras los cartoneros esperaban que los atendieran en el Palacio Municipal, cortaron el tránsito en 12 y 53, lo que motivó un denso embotellamiento en 54 de 12 a 14 durante casi dos horas. El malhumor de los automovilistas fue creciendo con el correr de los minutos, en la hora pico de la mañana.

Pasadas las 11 el centro platense fue ganado por una protesta de los afiliados a la Asociación de Trabajadores del Estado (ATE) junto a gremios docentes disidentes a la conducción provincial de Suteba.

Estuvieron un largo rato frente al ministerio de Economía bonaerense, en 8 entre 45 y 46 y luego ganaron la avenida 7 desde 45 hasta la Legislatura. Ese paso lento de las organizaciones gremiales hacia la Casa de Gobierno bonaerense generó numerosas complicaciones en el tránsito vehicular.

Los micros desviaron sus habituales recorridos y tomaron por calle 9, desde 54 hasta diagonal 74. Cuando el mediodía había llegado, la calle 54 de 7 a 9 fue un embudo del que resultó dificil salir para los automovilistas que quedaron atrapados. En tanto, los micros, taxis y remises que llegaban por diagonal 79 y por 6 hacia plaza San Martín se desviaron por 54 hacia 4, lo que generó otro nudo vial de proporciones en esa calle de la Ciudad.

Quienes se enteraban de la marcha, y estaban en los alrededores del microcentro, optaban por tomar calle 5 y por 10 para ir en dirección ascendente. Las calles 9, 4 y 6 -esta última hasta que llegó la marcha de los estatales- fueron las elegidas para circular en dirección descendente.

En ese lío, muchos pasajeros de las distintas líneas de micros quedaron desorientados y les preguntaban a los choferes por dónde podían tomar los ómnibus para llegar a destino.

Pero no sólo el tránsito fue una pesadilla. Conseguir dinero en los cajeros automáticos también. Tras las vacaciones de invierno, quienes regresaron a la ciudad, los empleados estatales que comenzaron a cobrar sus haberes y algunos jubilados que ya habían cobrado la semana pasada pero necesitaban más efectivo para afrontar diversas obligaciones impositivas y pagar los servicios.

Las colas en los cajeros automáticos comenzaron desde temprano y estuvieron a lo largo de la jornada. En 48 entre 6 y 7; en 6 entre 46 y 47, en diagonal 80 y 45, como así también en algunos cajeros de la calle 12, las colas fueron creciendo mientras la jornada llegaba al mediodía.

“Se nota que terminaron las vacaciones”, apuntó un jubilado que no quiso ir la semana pasada a cobrar sus haberes para estar “más tranquilo tras la finalización de los turnos de pago”.

PROBLEMAS POR UN ACCIDENTE y en los colegios

Los accidentes de tránsito (de los que se informa en la página 21) también dejaron su huella. Por la mañana temprano hubo un choque en la zona de la Estación de Trenes y los vehículos involucrados en el siniestro quedaron en la zona durante varias horas, en las inmediaciones del colegio San Vicente de Paul .

En la mayoría de los colegios privados donde ayer regresaron las clases el tránsito volvió a ser caótico: 55 entre 10 y 11; 10 y 44; 6 entre 41 y 42, fueron algunos ejemplos.