La nueva guía teléfonica disparó confusión y quejas de los usuarios

El nuevo formato de la guía telefónica en la que brilla por su ausencia el directorio con números y direcciones de los clientes particulares de Telefónica generó un gran desconcierto y fuertes críticas entre los vecinos de la Región. Es que con la entrega correspondiente al año 2015 solo se recibió un pequeño ejemplar que contiene las páginas amarillas y un CD para descargar los números telefónicos residenciales en las computadoras.

Leopoldo Domínguez de la zona de 57 y 6 se mostró molesto por los cambios: “esto afecta negativamente a los usuarios residenciales de líneas telefónicas fijas en la Ciudad porque fueron ignorados en el directorio”, apuntó el vecino.

Cabe aclararse que el delgado directorio solo cuenta con los nombres, direcciones y teléfonos de quienes desarrollan alguna actividad comercial o profesional en La Plata, Berisso y Ensenada.

La crítica de los vecinos coincide en que con la nueva edición, se perdió un servicio público que permitía ubicar teléfonos y direcciones de las personas.

PAGINAS AMARILLAS

La nueva guía está dedicada a las páginas amarillas con avisos, o sea quienes publicitan en sus páginas o quienes pagan para estar en estas.

Una de las ventajas de la telefonía fija que era la de contar con un directorio telefónico que ofrecía a sus usuarios información de sus números y direcciones. Ese elemento facilitaba la búsqueda de terceros, y era, se suponía, parte del servicio prestado por Telefónica.

Alicia Fernández, vecina de la zona de 8 y 55, también se sorprendió por los cambios. “La guía siempre fue una referencia, uno podía encontrar a sus amigos y familiares y a la vez podía ser hallado, todo eso se perdió”, dijo la vecina.

La mujer señaló que se comunicó con Telefónica y con Páginas Amarillas para protestar por la omisión de apellidos de la nueva guía. Sin embargo no obtuvo respuesta. “Los empleados de Páginas Amarillas me dijeron que la encargada de hacer la guía es Telefónica y que nunca le mandaron las listas, en definitiva se echan la culpa unos a otros”, dijo la mujer.

En suma, los usuarios de telefonía fija deberán guardar como un tesoro las guías telefónicas anteriores al 2015, pero además rogar que nadie cambie de número o se mude.

Si bien con la entrega de las nuevas guías también se repartió un CD en el que figuran todos los números telefónicos y direcciones, muchos vecinos se quejaron porque les resulta complicado usar computadoras o directamente no disponen de esos ordenadores.

Esa fue uno de los aspectos que incomodó a Osvaldo Vellettini de la zona de 39 entre 14 y 15.

Otros vecinos se preguntaron qué harían en el caso de no poder acceder a las computadoras por cortes de electricidad o aquellos que utilizan tablets o sus teléfonos celulares , sin posibilidad de incorporar la información del CD que entregó Telefónica.

Este cambio preocupó a muchos vecinos porque ya no pueden encontrar a sus conocidos. Ese es uno de los problemas señalados por Horacio Acosta de la zona de 59 entre 24 y 25, quien hasta ahora estaba habituado a utilizar la guía de papel.

ANTECEDENTES

En los últimos años la Guía fue objeto de distintas quejas por parte de los usuarios, ya sea por el tamaño de las letras o por la diagramación que obligaba a los consultantes a conocer de ante mano el barrio de pertenencia del cliente buscado.

En 2009, la Asociación de Diseñadores en Comunicación Visual, hizo una presentación en la Comisión Nacional de Comunicaciones (CNC) en la que se pidió que se reimprimiera la edición de la guía de ese año. Además se solicitó que la empresa se abstuviera de cobrar los avisos destacados, ya que “estaría recibiendo una retribución por la prestación de un servicio deficiente”.

Los responsables de la Asociación de Diseñadores emitieron un comunicado en el que se señaló que se “presentó un reclamo formal solicitando que se reimprima la guía telefónica 2009, debido a los graves problemas que provoca su confección y que son de público conocimiento, tornándola en una pieza de comunicación inútil para su uso”.

Además, se solicitó al organismo que “arbitre los medios para que la operadora telefónica se abstenga de cobrar los avisos destacados”.

En ese momento se criticó el hecho de que para buscar un destacado, ya sea de algún diseñador que adquirió el servicio o bien otro profesional, hubiera que saber el barrio o zona donde estaba ubicado. Se describió esa guía como un elemento “mal diseñado y poco entendible para el usuario”.