Reclamos por subas de hasta el 600% en las boletas del gas

La espera terminó, y las noticias no son buenas para el bolsillo de miles de familias de la Región. Las boletas del servicio de gas natural correspondientes a lo más crudo del período invernal, tal como se preveía, cayeron como una bomba en los presupuestos hogareños, con aumentos que promediaron el trescientos por ciento pero en algunos casos llegaron al 600%, en comparación con las facturas precedentes y las equivalentes de 2014.

Las subas, de acuerdo con lo establecido en un cuadro tarifario que se aprobó en abril pasado con “premios y castigos”, son inevitables a menos que se consuma un veinte por ciento menos fluido que un año atrás. Para la mayoría, una misión imposible.

“Este mes me vinieron $743,89, que comparados con los $126,89 del bimestre anterior son de no creer”, relató Eugenia Montenegro, de calle 53 entre 30 y 31. La vecina de Gambier, perpleja, reveló que en su casa se quedaron “fríos” cuando vieron la suma adeudada a la empresa Camuzzi Gas Pampeana: “no estaba para nada contemplada en el presupuesto de este mes”, admitió.

Pedro Castellani y su esposa María Luisa también se llevaron “un susto” cuando el cartero les entregó una boleta de $654. “Consumimos prácticamente los mismos metros cúbicos que el año pasado, y vamos a pagar casi el doble”, explicó la mujer: “tenemos un solo calefactor para toda la casa, era imposible ahorrar más; para los que cobramos jubilaciones es un tema complicado”.

En abril del año pasado, una resolución del Enargas introdujo subas tarifarias, pero también un esquema de “premios” para que quienes moderaran su consumo, en pos del “consumo racional”, pudieran evitarlas.

En Camuzzi afirman que los precios no se tocan desde agosto de 2014, pero admiten que es ahora cuando se siente de lleno el impacto del nuevo cuadro tarifario. Sólo pagan lo mismo que el año pasado quienes ahorran más del veinte por ciento de gas respecto del mismo mes -o bimestre- de 2014.

En cambio, pagan con un ligero aumento quienes registran un ahorro de consumo de entre el 5 y el 20 por ciento; y el pleno peso del ajusta recae sobre quienes en sus medidores no registran ahorro, o éste es menor al 5 por ciento.

La normativa vigente hace que, por ejemplo, un usuario residencial de la categoría 4 (R4) que en julio del año pasado pagó $0,71 cada uno de los metros cúbicos de gas utilizados, ahora deba abonar el costo de la unidad de medida a $1,60.

De acuerdo con su consumo anual -siempre medido en metros cúbicos-, los usuarios residenciales están categorizados en tres grandes grupos: R1 (hasta 500 m3), R2 (de 501 a 1.000 m3) y R3 -de 1.001 en adelante-. Estos grupos, que a su vez tienen subdivisiones, pagan diferente cada metro cúbico que usan.

Por ejemplo, quienes están incluidos en el grupo de menor consumo lo pagan hoy $0,39. Pero si logran ahorrar entre un 5 y un 20 por ciento en relación con el mismo período de 2014, ese precio baja a $0,26; y si ahorran más del veinte por ciento, $0,13.

En el otro extremo de la escala de consumo (más de 1.800 metros cúbicos al año, categoría R3-4), quienes no hayan ahorrado pagarán por cada unidad de medida $1,60; si consiguen usar entre un 5 y un 20 por ciento en relación con el mismo período de 2014, las pagarán $0,91; y si ahorran más del veinte por ciento, $0,22.