Una actividad que crece y se afianza

Se celebra hoy en el país el Día del Seguro, instituido, por decreto, en 1944, a instancias de la Superintendencia de Seguros de la Nación, que estableció la fecha en rememoración de un iniciativa impulsada el 21 de octubre de 1811 por el Primer Triunvirato del Río de la Plata en la que se buscaba, con una nota enviada al Tribunal del Consulado, crear un Banco de Descuentos y una compañía de seguros marítimos.

Para festejar este nuevo aniversario, la Asociación Argentina de Productores de Seguros -AAPAS- (nucleamiento que integra la FAPASA (Federación de Asociaciones de Productores de Seguros) organiza en estos días su evento nacional, que en esta oportunidad se desarrollará entre el 26 y el 27 de este mes en la ciudad de Córdoba.

La actividad de los productores-asesores la regula la ley 22.400, normativa que encuadra los derechos y deberes de estos profesionales en todas sus facetas.

Entre otros temas, el encuentro tratará cuestiones referidas al estado del mercado asegurador, las tendencias y el crecimiento del sector en nuestro país. Asimismo, se tratarán las obligaciones tributarias del sector en las distintas jurisdicciones en las que se opera. Es que, según se resaltó desde la entidad, “el alto costo impositivo que se debe afrontar constituye un importante núcleo de preocupación profesional”.

La institución

AAPAS posee estrechos vínculos con la Confederación Panamericana de Productores de Seguros. Estas y otras modalidades de reconocimiento mutuo constituyen ámbitos propicios para la visualización de los entornos aseguradores, el accionar de sus agentes y la ubicación de líneas predominantes y emergentes en el sistema.

La filial platense de AAPAS participa activamente en el directorio de la FELP (Federación Empresaria de La Plata), en el Consejo de Instituciones de la UNLP y en la Agencia Nacional de Seguridad Vial.

La entidad destacó también que los productores y sus organizaciones cuentan con un dispositivo de formación profesional básico y permanente de carácter obligatorio, dependiente de la Superintendencia de Seguros de la Nación, que se concreta con el esfuerzo mancomunado de compañías y la Asociación de Productores.

Defensa del Asegurado

En los últimos años se ha formalizado el funcionamiento de la Comisión de Defensa del Asegurado, cuyo principal objetivo es brindar apoyo al cliente en sus eventuales reclamos y garantizarle su derecho a la libre elección de su asegurador. En este sentido se alerta frente a la acción coercitiva de, por caso, entidades financieras o planes de ahorro que generan un mercado cautivo expuesto, que llevan muchas veces a afrontar costos por encima de los promedios correspondientes y a padecer una atención precaria frente a la siniestralidad.

Es habitual, según se explicó desde la AAPAS, que ante la falta de solución a sus problemas específicos los asegurados que no han podido elegir libremente, recurren a sus productores en busca de soluciones. El productor de seguros brinda su disponibilidad permanente en el acompañamiento y gestión focalizada en el interés de sus clientes.

La filial local de la Asociación ratificó su “compromiso profesional y social en la defensa de los intereses de sus asociados, de sus asegurados en particular y de la comunidad en general”.

Son los actuales integrantes de la Comisión, Mario Turkenich (presidente del cuerpo y de la delegación regional), Susana Lasalle (subdelegada); y Graciela Abraham, Eduardo Ruesta, Jorge Tarling, César Palumbo, Irene Trotta, Roberto Di Marco, Vicente Valenti, Daniel Speranza, Ana Coscarelli y Sergio Termouville (vocales).

Un sistema con historia

El 21 de octubre de 1811, en una nota dirigida por el Primer Triunvirato al Tribunal del Consulado, se oficializó la primera iniciativa gubernamental de crear un Banco de descuentos y una compañía de Seguros Marítimos. Nunca quedó debidamente documentado quién fue el impulsor del proyecto, pues algunos historiadores se lo atribuyen a a Bernardino Rivadavia y otros estudiosos aseguran que fue Manuel Belgrano, con sus ideas fundantes en la organización nacional, quien propuso la iniciativa.

Esa creación tenía antecedentes en estas tierras del Cono Sur, pues el 7 de noviembre de 1796 se había formado la primera Compañía Colonial de Seguros en Buenos Aires, “La confianza”. Ya por entonces, se establecía un contrato comercial entre un asegurador que mediante el cobro de una prima se obligaba a dar cobertura en el caso de que se produjera un daño o una pérdida del objeto asegurado.

Según explicaron especialistas, “el seguro, en tanto creación cultural, es anticipatorio de los riesgos socioeconómicos y humanos y depende de la comprensión de su utilidad en la población” y en ese sentido se remarcó que quienes ejercen la actividad deben buscar “una adecuada comunicación y una práctica idónea para la protección de vidas y patrimonios”.

La AAPAS, resaltó, en ese sentido, la importancia de “recurrir a profesionales en la materia a la hora de elegir un instrumento de protección que se ajuste a las necesidades específicas de cada usuario”.

“El seguro, en tanto creación cultural, es anticipatorio de los riesgos socioeconómicos y humanos y depende de la comprensión de su utilidad en la población”, explican desde AAPAS