Berisso: se viene otra pelea en el Concejo Deliberante

Dos nuevos intentos de los concejales berissenses por llegar a un acuerdo sobre quién presidirá ese Cuerpo a partir del 1° abril, fracasaron en las últimas horas con lo que se profundiza la crisis política desatada en ese ámbito.

El conflicto se generó luego que el presidente del Concejo berissense, Angel Celi, anunciara que dejará la presidencia para poder dedicarse a la campaña política que lo tiene como candidato a intendente por el massismo.

Según la postura de Celi, el reglamento interno determina que las autoridades del Cuerpo se renuevan año a año mientras que otros ediles sostienen que el mandato es por dos años.

Con todo, la decisión de Celi dejó abierta la posibilidad de que cada bloque político vote a su propio candidato con lo que el oficialista Frente para la Victoria podría recuperar la presidencia del Concejo perdida a manos de la oposición luego de las elecciones generales de 2013.

En las últimas horas se supo que fracasaron dos reuniones entre ediles para ponerse de acuerdo en quien tomará la posta que deja Celi.

El Frente Unen, que hasta ahora acompañó la mayoría de las decisiones del massismo, generalmente enfrentadas a los intereses del oficialista Frente para la Victoria, considera que el sucesor natural de Celi debe ser el concejal radical Héctor “Cacho” Méndez, vice presidente primero del Cuerpo.

En contraposición a esa lectura de cómo debe resolverse el conflicto que planteará la renuncia de Celi, el massismo y el FpV, en sus dos versiones sciolista y randazzista, estiman que debe realizarse una nueva elección que podría redundar en un cambio de conducción política en el Concejo Deliberante.

En las últimas horas y tras haber fracasado dos reuniones, desde diferentes espacios políticos se dejó trascender que cada bloque votaría a sus propios candidatos.

El mapa político en el Concejo cambió sustancialmente desde 2013 toda vez que ediles que alcanzaron acuerdos para controlar la presidencia hoy son precandidatos a intendente lo que modifica el entramado de las relaciones políticas. En ese marco se especula con que el peronismo dividido entre sciolistas y randazzistas alcance un acuerdo para quedarse con la Presidencia del Concejo hasta el final del período 2015.