Russo y Pérez Companc ganaron por primera vez en la Clase GT2

POTRERO DE LOS FUNES (Enviado especial).- "Todavía no caigo, se me hace difícil pensar que ganamos por primera vez en la GT2 de FIA-GT; increíble todo lo que se me ha dado este año; ¡y pensar que estuve a punto de dejar de correr!, hasta que me llamó Martín (Christie, director deportivo del Pecom Racing) para correr junto a Luis", Matías Russo celebró con lágrimas y mirando al cielo (el sábado falleció su abuela Haydee) en el podio junto a Luis Pérez Companc, el triunfo alcanzado que sirvió para coronar de la mejor forma, la primera temporada del dúo argentino en la categoría con la Ferrari F430. Luego de dos duras horas de carrera, donde debieron sortear un par de situaciones a lo largo de las 50 vueltas que no resultaron tediosas, que los llevaron a rozar los paredones y algunas pasadas, se impusieron por apenas 1s248 sobre el italiano Gianmaría Bruni y el finlandés, Toni Vilander con otra Ferrari, coronados campeones.

Los belgas Anthony Kumpen y Bert Longin con un Saleen S7 ganaron la GT1 y la carrera por nada mas que 561/1000 a Hezemans-Gollin en el Chevrolet Corvette Z06. Una dura pelea que insólitamente se prolongó hasta luego de caída la cuadriculada. Hezemans creyó que faltaba una vuelta, se tiró con todo en una chicana y le dio al auto que manejaba Login, que fue a parar contra la pared. Suerte que habían terminado!. El 4º puesto les bastó a los italianos Andrea Bertolini y al alemán Michael Bartels, para llevarse el campeonato de la Clase GT1 con la impresionante Maserati MC12.

Los argentinos en la clase mayor anduvieron mas que bien. Christian Ledesma compartió el Chevrolet Corvette Z06 con los belgas Maxime Soulet y Furnal y se lució. Apenas había dado 6 vueltas el sábado y 5 en tanques llenos, y no sólo no cometió errores como pretendía, también tuvo tiempo "para disfrutar al manejar semejante auto, hacía 10 años que no manejaba tanta potencia, desde la última que corrí en Magione, Italia, en F-3000, esos autos tenían 500 caballos", contó muy satisfecho y con los pies ampollados.

Los del ACA Argentina, con suerte dispar. Pechito López al rato de ganar en TC 2000, se subió a la Ferrari 550 Maranello y anduvo como una flecha. Desde el último lugar (no había clasificado), llegó al 4º puesto; bien acompañado por Esteban Tuero, lograron el mejor resultado del año para la escuadra, 4tos. Como se preveía (corrieron sin dirección hidráulica en la otra 550 Maranello), no les fue bien a Martín Basso y Gastón Mazzacane, abandonaron luego de dar 17 vueltas. Tampoco pudo llegar Risatti, estuvo impecable Caíto con otro Corvette, junto a Marcel Fassler hicieron la punta hasta que el suizo le dio duro a la pared con 41 vueltas cumplidas. En tanto, el restante compatriota, José María Balbiani (Ferrari 430, GT2), 15º con 45 giros.

"Esto es increíble, cerrar nuestro primer año en la GT2 con un triunfo y en nuestro país, ha sido inolvidable. Para mí le gana por milésimas en cuanto a importancia al 5º puesto en el Rally de Japón entre los World Rally Car", resaltó Pérez Companc. A tan inolvidable logro de Luis y Matías Russo, sólo le faltó la presencia de la bandera argentina y el Himno Nacional, en la ceremonia del podio (fue izada la bandera italiana y se escuchó el himno de ese país, porque el equipo propiedad de la Ferrari es tano).