Una avispa “guardiana de criptas” nace de la cabeza de su huésped

Especial para EL DIA
de National Geographic

Se ha descubierto una nueva especie de avispa parásita con un ciclo vital tan diabólico que fue bautizada Set, como el dios egipcio del mal y el caos.

E. set, especie oriunda del sudeste de EE UU, pone sus huevos dentro de las pequeñas cámaras de madera que otra especie de avispa parásita, la Bassettia pallida, talla en robles vivos. Estas protuberancias nudosas son como quistes provocados por la presencia de la cría de la avispa huésped.

Set inserta huevos fertilizados en las larvas de la B. pallida y altera su desarrollo haciendo que las larvas de B. pallida intenten abandonar la cripta antes de estar totalmente desarrolladas y queden bloqueadas en el túnel de salida que resulta demasiado estrecho para ellas.

Mientras la larva de B. pallida se encuentra inmovilizada en túnel que ella misma ha horadado en la corteza del roble, la larva de E. set sigue desarrollándose en su interior, alimentándose de sus órganos, consumiendo a su huésped de adentro hasta que eclosiona y sale al exterior a través de un agujero en la cabeza de la B. pallida muerta.

El tocayo de la avispa, el dios egipcio Set, podía controlar a serpientes y hienas y también encerró a su hermano Osiris en una cripta donde lo asesinó y mutiló. Hasta Kelly Weinersmith, parasitóloga de la Rice University y autora principal del estudio cree que la conducta de la avispa “es espeluznante”.

“Pero también es sorprendente que un parasitoide haya logrado, por selección natural, manipular a su huésped de esta forma”, añade Weinersmith, cuyo estudio fue publicado recientemente en Proceedings of the Royal Society B.

“La mayoría estamos familiarizados con el parasitismo, por el cual una criatura -como una sanguijuela o una garrapata- vive a expensas de otra. Los hiperparásitos son parásitos que se aprovechan de otros parásitos, como las avispas parásitas que ponen sus huevos en otras avispas parásitas que a su vez ponen huevos en orugas”, agregó.

Pero ¿un parásito (avispa E. set) que manipula el comportamiento de otro parásito (B. pallida) que manipula el comportamiento de su huésped (creando protuberancias en robles)? Este tipo de muñeca rusa macabra se denomina hipermanipulación y está mucho menos comprendido.

“Sin duda los investigadores descubrieron algo especial”, opina Emily Meineke, de la Universidad de Harvard, quien estudia las interacciones entre los parasitoides y sus huéspedes. Meineke se mostró impresionada por la forma en que los investigadores demostraron que la guardiana de criptas se beneficia manipulando a su huésped.

Weinersmith y sus colegas sellaron a las guardianas de criptas dentro de las cámaras sin que hubiera otra avispa a la cual raptar, y luego registraron cuántas lograron salir solas. Sin la ayuda de otras especies de avispas, las guardianas de criptas tenían tres veces más chances de morir en la cripta.

“Hay muchos ejemplos de hiperparasitismo entre las avispas parasitoides, pero la manipulación de una conducta compleja y poder documentar que mejora el estado, es realmente raro”, dice Meineke.

Además de descubrir de qué manera la guardiana de criptas puede controlar la mente de su huésped, Weinersmith y sus colegas quieren saber si esta conducta está presente en otras especies.

Después de todo, las especies viven en el muy poblado sudeste de EE.UU., no en un afluente del Amazonas. Scott Egan, autor senior del estudio, descubrió originariamente la E. set en la costa del golfo de Florida, y volvió a detectarla en árboles de la Rice University, en Houston.

“Quizás la E. set y sus increíble biología sean terriblemente comunes y podríamos no haberlo notado hasta ahora”, observa Andrew Forbes, biólogo evolutivo de la Universidad de Iowa y coautor del estudio.