Underwood, picante, emprende el regreso

“Tá difícil competir” escribió el ficticio Frank Underwood ayer, en la cuenta oficial de Twitter de “House of Cards”, exitosa serie que en apenas diez días volverá a la programación de Netflix con los nuevos capítulos de la quinta temporada. El personaje más siniestro del servicio on demand, claro, estaba haciendo referencia a su “colega”, el mandatario brasileño Michel Temer, quien quedó acorralado en un supuesto escándalo de corrupción que puso al país carioca al borde de la crisis institucional.

“House of Cards”, una adaptación de una serie británica con el mismo nombre, narra el tenebroso ascenso político de Francis Underwood (Kevin Spacey) y Claire Underwood (Robin Wright), un matrimonio sin escrúpulos dispuesto a cualquier cosa, dentro y fuera de la ley, para alcanzar el máximo poder en Washington.

El matrimonio Underwood genera todo un terremoto político en la Casa Blanca por medio de todo tipo de artimañas, pero los guionistas de la ficción aprecian que lo que vive Brasil desde la noche del miércoles es todavía más oscuro.

El escándalo que ha puesto en jaque a Temer estalló con la divulgación de que habría sido grabado por un empresario que colabora en investigaciones sobre corrupción en momentos en que avalaba sobornar a un ex diputado preso a cambio de su silencio.

El objeto del supuesto soborno sería Eduardo Cunha, ex presidente de la Cámara baja, promotor del juicio político que condujo el año pasado a la destitución de Dilma Rousseff y llevó a Temer al poder y ya condenado por su responsabilidad en los desvíos de Petrobras.

A raíz de esa supuesta grabación, la Corte Suprema de Brasil ha abierto una investigación contra el mandatario, quien ha manifestado con rotundidad su intención de mantenerse en el cargo.

MARCA REGISTRADA

No es la primera vez que los genios de marketing de Netflix, en este caso, detrás de “House of cards”, se meten en la “realidad” para promocionar sus novedades. De hecho, esta semana, varios frentes de vivientes porteñas fueron “víctimas” de la campaña ficticia de los Underwood, muy a tono con la forma de hacer promoción política en nuestro país.

“Votá Underwood”, dicen las pintadas, que se pueden ver en varias esquinas de Palermo y están diseñadas con la típica tipografía en blanco y celeste que usan los políticos locales. Esta acción, a pesar de lo creativa, generó polémica.

Días atrás, en la cuenta de la red social del pajarito también publicaron un video que utiliza irónicamente la fórmula del recordado spot de campaña “(Carlos) Menem lo hizo” (en este caso “Frank lo hizo”) con imágenes donde se ve al protagonista de la serie haciendo de las suyas para mantenerse como el hombre más poderoso de la Casa Blanca.

El año pasado, en tanto, antes del inicio de la cuarta entrega, transeúntes se sorprendieron cuando se toparon, en pleno paisaje porteño, con foodtrucks que promocionaban la serie, en la que regalaban “choripanes y cocas”.

Mucho ruido hizo también, por caso, el tuit que Underwood le envió a Mauricio Macri, el mismo día que abriera las sesiones ordinarias en el Congreso de la Nación.

“Ahora es mi turno, Mauricio Macri. PD: gracias por la intérprete. FU”, posteó el personaje interpretado por Spacey en Twitter, acompañando un video con un trailer de la nueva entrega que, como guiño argentino, tiene en su margen inferior derecho a la famosa intérprete de la Tevé Pública.

Más divertido, incluso, fue el “mensaje” irónico que FU le envió a Federico Pinedo, quien quedará en la historia argentina por haber tenido una presidencia de 12 horas entre los mandatos de Cristina Kirchner y Mauricio Macri.

“@PinedoFederico Tu presidencia fue la más perfecta en la historia de la democracia. Espero tener tu apoyo el #4M”, le escribió al Senador, en una sarcástica campaña de promoción de la cuarta temporada de “House of Cards”.

Pinedo, sorprendente, le siguió el juego, aunque evitó darle su apoyo. “@HouseofCards gracias Frank. Tenemos diferencias de metodología política. Trabajaremos juntos x la paz y la prosperidad de nuestros pueblos”, escribió el Senador, en aquel entonces.