Un taxista platense zafó por poco: lo apuñalaron en un robo

Cuando Raúl Bezombe (60) vio subir -cerca de las 7 de la tarde del jueves- a su taxi en 19 y 44 a un hombre de unos 40 años que le hizo señas, ni remotamente sospechó la odisea que iba a hacerle padecer un rato después.

Es que de acuerdo a lo que ayer le contó a este diario su hijo, Nicolás (30), también taxista, el supuesto pasajero estaba bien vestido y demostraba buenos modales.

Enseguida le solicitó a Bezombe un viaje hasta 138 y 38, donde en lugar de abonar el costo atacó sin mediar palabra al chofer, con una sevillana.

El taxista poco después fue llevado en un patrullero al UPA de Los Hornos, aunque más tarde tuvo que ser atendido también en el hospital Gutiérrez, donde, por la herida más importante, una puñalada cerca del glúteo de la pierna derecha, “le dieron cuatro puntos de sutura”, contó el hijo de la víctima.

“LLEGO Y LO ATACO”

Cuando este diario acudió hasta el domicilio del taxista asaltado y herido, fue atendido por su hijo Nicolás, quien enseguida expresó que “papá no se siente de ánimo para hablar de lo que le pasó”.

El muchacho aludió sobre el momento del violento asalto que “apenas frenó en 138 y 38, el delincuente sacó rápido una sevillana y comenzó a pincharlo. Fueron cuatro ó cinco veces y la más brava de todas fue en un costado de la pierna, a centímetros del glúteo derecho”.

En reacción instintiva a esa agresión, Bezombe quiso parar la mano del ladrón, para evitar que lo siga lastimando. Pero en esas circunstancias terminó cortado en una de sus manos.

Esa situación fue usufructuada por el asaltante para llevarse de arrebato un celular.

Según un parte policial relacionado a este violento episodio de inseguridad, el delincuente también se dio a la fuga “con una suma aproximada de 500 pesos”.

Pero el hijo de la víctima aseguró a EL DIA que “la recaudación no se la pudo robar, porque papá tenía la billetera con el dinero en un bolsillo de su pantalón. Eso porque previamente había ido a hacer una compra a una panadería”.

Afortunadamente, el delincuente desistió de sustraerle también el taxi, un Chevrolet de patente LMZ-898, disco 1150.

De acuerdo a lo que Bezombe le dijo a la Policía tras el ataque, el sujeto que o hirió “vestía campera blanca y pantalón del mismo color. Rondaba los 40 años y tenía estatura media”,

Su hijo Nicolás, asimismo, reveló que una vez que el asaltante huyó de la zona, “mi papá dio con un patrullero y le dijo a los policías que acababan de robarle y que estaba herido porque el ladrón lo había atacado con una sevillana”.

“También le describió cómo era físicamente el delincuente y la ropa que tenía puesta, pidiéndoles que salieran a perseguirlo”, reflejó.

Y acotó que “pero no le hicieron caso y prefirieron llevarlo hasta el UPA de Los Hornos. Ahí le limpiaron mas que nada las heridas. Pero más tarde fue necesario que recibiera una mejor atención médica y fue hasta el hospital Gutiérrez”.

El joven hizo saber que en este último centro asistencial “le dieron cuatro puntos de sutura por la herida en la pierna”.

“Los médicos le recomendaron tres días de reposo y además le aconsejaron que tome un analgésico”, completó.

Por otra parte, Nicolás consignó que en repudio a este ataque a su padre “con otros taxistas cortamos el tránsito en 7 y 50, donde habitualmente tenemos nuestra parada, entre las 13.30 y las 15”.

Además, mencionó que “dejamos un petitorio en el Concejo Deliberante y en Gobernación, porque creemos que debemos trabajar con un tabique de vidrio en el auto”.

OTRO ATAQUE

Habría ocurrido en las últimas horas cuando asaltaron a otro taxista en la esquina de las calles 4 y 71.

Allí le sacaron el dinero y el auto, que después apareció incendiado en 6 y 84.