Básicos para el invierno

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Conectados con la naturaleza, los materiales naturales son imprescindibles al momento de pensar la decoración de cualquier espacio. Son absoluta tendencia porque su esencia natural es práctica y estética. Lo importante es elegir diseños sencillos pero muy actuales, de líneas depuradas y contemporáneas. Esta temporada, triunfa el mobiliario de madera, pero con superficies lisas, muy simples. Combinan bien con todo tipo de texturas. Y si eres un enamorado del estilo rústico, descubre cómo recrearlo de la forma más chic y actual.

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Si lo que buscas es una decoración cálida para el invierno en tu salón, procura que no te falten las alfombras. Son uno de los elementos estrella de los ambientes más confortables y acogedores. Actúan como una segunda piel para los suelos, protegiéndolos y haciéndolos más cálidos.

Cuando vayas a elegirlas, opta por modelos de gran tamaño, que sobrepasen los muebles (de otra forma parecen raquíticas). Y si las que te gustan son pequeñas, combina varias y ponlas juntas.

Para el frío van genial las alfombras de lana, con pelo largo o más corto. Resultan muy cómodas y suaves. También triunfan las de piel, que son tan actuales y aportan un plus de modernidad. Y no hablo solo de las de piel de vaca, también de potro, cebra, cabra, etc. De todas las formas posibles y con todos los acabados, las pieles resultan infalibles en la decoración cálida para el invierno.

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Para subir, sin subir, algunos grados de temporada será necesario incluir en la deco algunos elementos que lo caldeen, como las tapicerías suaves y abrigadas. Así, es recomendable optar por las tapicerías de cuero o de lana y, cómo no, también por las de terciopelo. Los almohadones de piel sintética y las mantas de pelo, tanto para taparte como para sobre poner en butacas y sofás, serán en invierno un elemento indispensable.

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Siempre que pensamos en una decoración cálida para el invierno nos vienen a la mente los colores más cálidos del espectro cromático. Y aunque no tienes por qué elegir continuamente el ocre, los castaños y los marrones y dejar de lado los fríos azules y verdes, sí es cierto que los colores que elijas contribuirán a determinar la temperatura de tus espacios.

Como líneas básicas de actuación, elige tonos calientes si buscas una decoración cálida para el invierno, pero no dejes a un lado colores que pueden combinar muy bien y aportar glamour: mostaza, turquesa, morado…

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Está claro que no es lo mismo, pero no todos tienen la suerte de poder disfrutar de la hipnótica mirada del fuego en una chimenea encendida. Si eres uno de los muchos que no tienen esa suerte, atento a este consejo: coloca algunas velas decorativas en puntos estratégicos de tu salón y enciéndelas. No es lo mismo, pero el brillo de las llamas aportará calidez a la atmósfera.

Combina las velas con una iluminación tenue, que provenga de lámparas sencillas dotadas de luces suaves. Así podrás conseguir un ambiente muy relajado. Para lograr esto van muy bien los reguladores de luz, que te ofrecen la posibilidad de decidir cuánta luz necesitas en cada momento. Instalarlos no es difícil.

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El primero de los básicos para tu casa en invierno son las cortinas, imprescindibles para evitar que entre el frío a través de las ventanas. Además, su importancia es fundamental, como uno de los objetos ideales para complementar la decoración.

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Los nórdicos son otro de los básicos para tu casa en invierno a la hora de dormir. Ligeros y amorosos, los puedes cubrir con fundas que se asemejen a la decoración de tu dormitorio. Los hay de colores vivos, más serios, lisas o estampadas. ¿Cómo te gusta combinarlas?

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Las mantitas para el sofá, además de abrigarnos cuando nos relajamos tras una dura jornada laboral, pueden servir como elemento de decoración ideal. Colócalas en los reposa brazos de los sillones o a los pies de la cama y conseguirás un toque especial. No olvides jugar con los colores para llamar la atención de los visitantes más envidiosos…