Otro misterioso ataque incendiario en el centro comercial de City Bell

En la zona comercial más coqueta de la Región, en torno a la calle Cantilo de City Bell, una modalidad de vandalismo empieza a abrirse espacio. Es la de desatar incendios en los patios delanteros de algunos negocios importantes, sin intentar robar ni buscar otro fin más que el de generar destrozos.

En una semana se registraron al menos dos casos, ambos uno enfrente del otro.

Las dos veces, los responsables consiguieron escaparse antes de que algún sereno o la policía los pudiera capturar.

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Ayer a las 5.40 de la madrugada, cuando nadie andaba por Cantilo entre 13 C y diagonal Jorge Bell, dos hombres jóvenes, de poco más de 20 años, eligieron a una cafetería para atacar.

Todavía no había nadie en una radio ubicada al lado. Solamente un cuidador vigilaba desde adentro: no trascendió si los atacantes no lo vieron o si lo desestimaron.

Uno de los dos encapuchados vertió un líquido combustible sobre el amplio deck de madera que se extiende en el frente de ese local gastronómico. Lo hizo describiendo una “U” que cubría casi toda esa superficie inflamable.

Mientras, el otro se quedó escondido, haciendo de “campana”. Un segundo después, le acercó fuego a la nafta y la combustión fue inmediata.

El mal tiempo que duró todo el fin de semana les jugó en contra a los vándalos: “El fuego se consumió rápido pero no afectó a la madera, que estaba mojada por la lluvia. Por eso fue que se apagó en dos minutos”, explicó Paula, la encargada de Market.

Para ella, también pudo haber influido la “mala calidad” del combustible que usaron. En definitiva, el daño solamente incluyó la lona de una silla.

El sereno de la cafetería salió a la calle cuando vio la fogata y no alcanzó a atrapar a los atacantes. Sorprendido por lo que había pasado, se reunió con otro empleado de un local cercano y supo de otro antecedente (ver Recuadro).

La policía fue a intervenir por lo ocurrido y recolectó datos para iniciar la investigación. Una prueba crucial fue la filmación de las cámaras de seguridad del negocio.

En ese material quedó captado cuadro por cuadro cómo fue la secuencia.

El registro podría servir para la identificación de los delincuentes. En la cafetería esperan que, con el aporte de filmaciones municipales y de otros negocios, el caso se resuelva rápido.