Le dieron luz verde a los “food trucks” en La Plata y ya hay cuestionamientos

Tal como se preveía, el Concejo Deliberante dio luz verde ayer a la llegada de los “food trucks” a las calles de la Ciudad. La aprobación de la ordenanza que permite y regula la actividad de los camiones de comida al paso abre la chance de que en cuestión de días, apenas la norma sea promulgada, estos microemprendimientos gastronómicos en boga aparezcan masivamente en parques, avenidas y ferias.

De acuerdo con el texto al que dieron su aval los ediles, estos rodados, en general motorhomes pequeños, casas rodantes o furgonetas, podrán solicitar la ubicación que prefieran, siempre y cuando no interfiera “con el normal desarrollo de otras actividades existentes en el lugar”, ni restrinja al público “en forma alguna, el normal uso y circulación en los espacios autorizados en la vía pública”.

Se baraja la idea de que se habilitarán al desembarco zonas en las que “no haya actividad comercial”, para “evitar la competencia desleal”.

El Ejecutivo comunal estará encargado de levantar o bajar el pulgar a las solicitudes, que deberán sustentarse en el cumplimiento de una serie de requisitos. “Además de tener pago y al día su canon, cada emprendimiento tendrá que pedir permiso ante el área de Espacios Públicos y la Agencia Platense de Recaudación, dando detalles de localización, horarios y días requeridos” precisa Marcela Farroni, autora del proyecto.

La concejal enrolada en el bloque de Alternativa Vecinal Platense subrayó que “el crecimiento del parque de food trucks local es notorio, y merece contar con una regulación que sea beneficiosa para todos los involucrados, desde los emprendedores a los consumidores; en este caso, trabajamos con el Ejecutivo municipal, con la participación de las distintas áreas que deberán intervenir, y buscando el mayor consenso que fuera posible entre todos los sectores”.

“Estamos ante un paso adelante en el control de la venta callejera de alimentos” afirmó Farroni: “los food trucks van a tener un lugar y un horario específico, y no van a ser iguales que un comercio porque sería una competencia desleal; se trata de expendio de comida y bebida, con control bromatológico, y a partir de uso de materiales y herramientas específica como parrillas, cocinas y heladeras, y un servicio de luz con generadores propios”.

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Sin embargo, la iniciativa ya fue cuestionada por trabajadores gastronómicos, que consideraron a la ordenanzan como “el colmo de la competencia desleal y la precarización laboral” (ver aparte).

CONTROLES “ESTRICTOS”

Semanas atrás, un mega-operativo de la Comuna contra las parrillas clandestinas, presencia habitual en numerosos puntos del casco histórico local, levantó polvareda. Agentes de la secretaría de Convivencia y Control Ciudadano desalojaron en la ocasión a ocho parrilleros, por “no cumplir con las medidas de seguridad ni las normas bromatológicas adecuadas”.

Mucho más sofisticados que estos precarios “chulengos”, los camiones de comida, se ser aprobados, contarán con “permisos precarios” por el plazo de un año.

Definidos como “todo servicio de comida que se encuentre dentro de un vehículo motorizado/remolcado autosuficiente y/o trailer, donde los alimentos y/o bebidas sean elaborados y comercializados en su interior de manera itinerante en los espacios de la vía pública que sean autorizados para tal fin”, no podrán vender, en principio, bebidas con alcohol.

REGISTRO Y REQUISITOS

Se estima que actualmente existen unos 200 en condiciones de salir a la calle. Podrán ser módulos con motor incorporado o acarreados por otros vehículos, y entre los múltiples requisitos que deberán respetar se cuentan el revestimiento interior en acero inoxidable; la presencia de un tanque de almacenamiento con agua potable, y otros de agua residual y de aceite; y contar con provisión de agua caliente, heladera y un equipo de cocina y calentamiento eléctrico, quedando prohibidas las instalaciones a gas o a leña.

También se estableció crear un “Registro de Food Trucks”, que operará en la Secretaría de Espacios Públicos y Gestión Ambiental y será autoridad de aplicación, encargada de determinar los horarios de ocupación y funcionamiento, las rutas de circulación y los lugares de estacionamiento que deberá respetar cada emprendedor.

En principio, se baraja la idea de que se habilitarán al desembarco zonas en las que “no haya actividad comercial”, para “evitar la competencia desleal”. Y se podrá obtener una sola habilitación por persona jurídicas o sociedad. Según se destacó, “se tomará como parámetro la normativa aplicable al ejercicio de las actividades gastronómicas”.

El texto sancionado ayer prohibe la venta de bebidas alcohólicas y cigarrillos; la instalación de carteles, toldos, mesas y sillas en el espacio exterior; el descarte de desperdicios en la vía pública; y la venta, préstamo, alquiler o transferencia del permiso de uso precario del camión.