La Región necesita políticas eficaces para una mejor recolección de residuos

La falta de aplicación de políticas continuadas y eficaces, según señalan los especialistas, ha determinado la existencia de un panorama ambiental poco satisfactorio en la Región, cada vez más necesitada de que se concreten avances significativos en lo que concierne tanto al servicio de recolección de los residuos como a la eliminación o neutralización de focos contaminantes. Ahora, tal como lo reflejó un artículo publicado en este diario, vecinos de Altos de San Lorenzo y de Villa Elvira reclamaron por la instalación en la avenida 13 desde 90 a 608 de contenedores que, en lugar de alivio aportaron más trastornos a esas zonas.

Tal como se informó, la instalación de esos volquetes permitió en un principio que muchos vecinos tuvieran un lugar donde poder depositar los residuos domiciliarios, pero con el correr de los días se advirtió que lo que pudo haber sido una buena acción terminó convirtiéndose en un grave peligro para los automovilistas y en la generación de más basura en las zonas.

Colocados en las esquinas y en el centro de la avenida -donde termina cada una de las ramblas centrales- los volquetes impiden una visión despejada a los automovilistas, ya que no permiten ver si algún otro vehículo avanza por las calles transversales. En tal sentido, los pobladores de la zona aseguraron que se producen de continuo frenadas y encontronazos. Al mismo tiempo, no debiera ser necesario aludir al peligro potencial que supone la presencia de contenedores en caso de que algún vehículo se desplace de su carril.

En otro orden, los vecinos también señalaron que hay gente de barrios cercanos, que se acercan hasta esos contenedores para arrojar allí sus residuos a cualquier hora, de modo que al atardecer esos recipientes se encuentran desbordados. Más tarde, añadieron, aparecen quienes trabajan con el cartoneo, revuelven la basura y dejan residuos esparcidos en torno a cada contenedor, originándose allí un verdadero foco infeccioso que atrae perros, roedores e insectos de toda naturaleza.

Por su parte, desde la Municipalidad se informó que se le pidió a la empresa Esur que revea la ubicación de los contenedores y el horario de la recolección de los residuos para evitar trastornos a los vecinos de la zona.

Lo cierto es que siguen faltando políticas integrales para resolver el problema de la basura. Frente a un desafío tan diverso como complejo, resulta evidente que las autoridades deben dar pasos coherentes hacia la mejor prestación de un servicio esencial para la salubridad pública. La falta de higiene que hoy acosa a la Región reclama reacciones rápidas, enmarcadas en criterios de eficacia técnica. No actuar de esa manera sería dejar a la población indefensa, gravemente expuesta a las distintas formas de contaminación.

Lo inadmisible sería que no se actuara frente a un problema que es común, que afecta tanto a ésta como a las futuras generaciones. Lo que sigue faltando, tal como se ha dicho, es una política definida e integral para lograr el mejor manejo de los residuos domiciliarios, no permitiéndose, además, que siga irresuelta la grave cuestión que significa la disposición final de residuos potencialmente muy peligrosos, como es el caso de llamada basura electrónica y el de las pilas y baterías.