La valiosa iniciativa de recuperar el Jardín Botánico como atractivo de la Ciudad

La decisión municipal de mejorar y poner en valor el Jardín Botánico y Arboretum de La Plata, así como la tradicional casona situada en ese predio fundado en 1891 por Carlos Spegazzini, para así sumarlo al circuito del Paseo del Bosque, constituye un paso positivo en la medida que se reintegrará al megacomplejo científico y cultural de relevancia que se conforma con el Museo de Ciencias Naturales, el Planetario, el Zoológico, el teatro Martín Fierro y otros lugares de interés histórico y turístico.

Tal como se informó, la iniciativa se ve respaldada por un convenio entre la Municipalidad y la Universidad Nacional de La Plata, que habilita la cooperación e intervención de técnicos que se encargarán de mejorar el lugar y de promocionar las visitas al jardín botánico situado entre las calles 116 y 118, desde la avenida 60 hasta la diagonal 113.

Como se sabe, las plantaciones originales consistieron en especies arbóreas nativas que el sabio había coleccionado en sus viajes científicos.

A partir del acuerdo, la Municipalidad colaborará con la limpieza integral del predio de casi tres hectáreas, la colocación de señales que identifiquen los ejemplares -la mayoría de ellos centenarios y de diversas especies- que se encuentran dentro del circuito, la posibilidad de instalar algunos juegos para los más chicos y, asimismo, la de crear lugares de descanso para el público visitante, entre otras acciones.

Importa destacar, entonces, que los visitantes -y las numerosas delegaciones escolares- que recorren el Bosque podrán disfrutar de un mayor contacto con la naturaleza, enriquecido por los aportes seguramente muy valiosos que podrán ofrecer los guías a cargo de recibir quienes acudan al sitio.

Se sabe que recientemente se sumó al Paseo del Bosque, como un atractivo de trascendente valor, el nuevo Planetario, con la más avanzada tecnología que permite la simulación de los fenómenos celestes tal cual se los aprecia a simple vista desde cualquier lugar de la tierra. A su lado se encuentra el tradicional Observatorio, el Museo de Ciencias Naturales y a pocos metros el Jardín Zoológico -que cuenta asimismo, desde sus inicios, con un jardín botánico de excelencia- constituyendo entre todos un verdadero polo de turismo científico y cultural.

El hecho, corroborado una vez más ahora, es que a La Plata le sobran motivos para atraer visitantes. Pocas ciudades disponen la posibilidad de anudar un paquete con servicios y actividades tan relevantes, a las que pueden sumarse los atractivos que pueden aportar la Catedral, el Teatro Argentino, la casa Curutchet, la propia Universidad, la República de los Niños y otros lugares históricos de la Región como el Fuerte Barragán, la Selva Marginal, la zona del Puerto y las playas de Punta Lara y Atalaya, por lo que deberían coordinarse acciones con los vecinos municipios de Berisso, Ensenada y Magdalena.

Pero está claro, además, que tales lugares merecen encontrarse en perfectas condiciones. Algo que no ocurre, en la actualidad, con algunos ellos, ganados por el abandono o la falta de un debido mantenimiento.

De allí que, confiando en que se concrete el anuncio oficial, resulte ponderable y digna de mención la decisión de recuperar el Jardín Botánico.