Los ataques contra el teatro argentino

Por ANA MARIA PORRUA

“Trabajo cerca del Teatro Argentino y paso casi todos los días caminando. Da pena...

“Es increíble que el principal teatro de la Ciudad se haya convertido en blanco de vandalismo sin que las autoridades hagan algo. Supongo que, como en tantas otras cosas, unos les tirarán la responsabilidad a otros. El resultado es lo que vemos todos: un teatro arruinado, deteriorado, descuidado y roto por actos vandálicos; `tomado` además por grupos de gente que ha encontrado en ese espacio una suerte de `aguantadero` en pleno centro.

“He leído hace poco que ahora piensan poner un cerco de rejas. Me pregunto, sin embargo, si esa será la solución y si no existen otras formas de cuidar el patrimonio público que no sea poniendo rejas.

“El Teatro Argentino se ha convertido, penosamente, en una postal de lo que no debería ocurrir en una ciudad y de la impotencia del Estado frente a minúsculos grupos vandálicos que se dan el lujo de actuar con toda impunidad”.