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Malvinas: la excusa británica para una reelección

La guerra fue la herramienta fundamental para que Margaret Thatcher obtenga la reelección en las elecciones del año 1983

Malvinas: la excusa británica para una reelección

Malvinas: la excusa británica para una reelección

27 de Marzo de 2015 | 12:48

La victoria en el enfrentamiento con la Argentina por el conflicto desatado en las Islas Malvinas, fue la herramienta fundamental que permitió al gobierno conservador liberal de Margaret Thatcher la reelección en las elecciones del año 1983. Y resulta que 32 años después, en nuestros días, Inglaterra pretende aplicar la vieja fórmula una vez más, pues el próximo 7 de mayo su pueblo asistirá a un nuevo llamado a las urnas.

Si bien el Secretario de Defensa británico Michael Fallon ha argumentado la necesidad de modernizar las instalaciones militares en las Islas Malvinas con la módica inversión de 420 millones de dólares, no hay dudas que nos encontramos ante una nueva escalada británica que -ahora- argumenta en su favor las "peligrosas" relaciones entre Argentina y Rusia, que podrían poner en peligro la libre decisión de los "kelpers" de elegir su ciudadanía inglesa en tierras argentinas usurpadas. 

Una falacia ridícula que esconde la excusa perfecta para militarizar aún más las instalaciones bélicas inglesas que hace años – década de los 80- se asientan sobre el suelo malvinense. No existe tal fantasma de esa amenaza, es sólo una entelequia oportunista para intentar -tres décadas después- repetir la jugada de la recordada "Dama de Hierro": la excusa de Malvinas.

Se agita el paño -incluso en medios de noticias argentinos- aduciendo la hipotética situación de que apareciera en escena un nuevo "Galtieri" argentino, quien podría pretender reivindicar militarmente las islas, como ariete político para la recuperación de la imágen decrecida del gobierno nacional, y para ello contaría con armamento bélico provisto por el gobierno ruso, además de su apoyo militar.

Argumentan posibles maniobras conjuntas en la zona marítima cercana al archipiélago, y alientan la sospecha de las verdaderas intenciones de Putín sobre esa zona mundial super estratégica geopolíticamente hablando. No se vislumbran en el horizonte argentino situaciones que permitan sostener este libreto, y por otra parte el potencial militar de nuestro País es obsoleto por completo.

Los ingleses tienen varios frentes que cubrir con miras a seducir al electorado para lograr continuidad en el gobierno: el primer ministro británico y líder conservador, David Cameron- -quien buscará su segundo mandato- ha dicho que no quiere seguir gobernando en coalición, sino hacerlo en solitario, tras las elecciones generales que se avecinan.

Para ello debe revertir varias situaciones adversas de los últimos años en el ejercicio del poder. En el frente interno las estadísticas electorales dan una alarmante paridad entre conservadores y laboristas. Ello haría que Cameron, a través de ésta hipótesis de conflicto lanzada, buscara lograr un apoyo "nacionalista" con la movida militar.

Desde la perspectiva externa, el Reino Unido ha quedado en soledad con la causa de Malvinas, y la Argentina ha recibido mientras tanto un fuerte apoyo internacional. No obstante el gobierno inglés viene incumpliendo sistemáticamente las resoluciones emanadas de la ONU donde se insta al Reino Unido a negociar una salida sobre el tema.

Dentro de dicho apoyo se encuentran el G77 (Grupo de los 77), China y el Grupo Brics (nueva potencia económica mundial conformada por China, Rusia, India, Sudáfrica y Brasil). La presencia rusa en éste sentido también sirve a la estrategia inglesa para fundamentar sus "temores" de una nueva ocupación territorial en el archipiélago de Malvinas. 

Por otra parte, y con la mira puesta en las elecciones norteamericanas del año 2016, Cameron sabe muy bien que éstas actitudes suyas pueden lograr nuevos apoyos de los EE.UU.,especiamente si triunfara el partido Republicano, pues para Wáshington, Rusia representa un serio peligro luego de los sucesos ocuridos en Crimea y en el Este Ucraniano.

Asistimos a una geopolítica de oportunidad y conveniencia que nos tiene como protagonistas pasivos, y que reedita falazmente una nueva versión de la tragedia que vivimos y le costó tantas vidas jóvenes a nuestro País. Así es como está el mundo...

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