Opinan los lectores

Telemarketing

Germinal Di Rocco opina: “La pródiga crónica de EL DIA respecto de la atribulación de los usuarios frente a los telemarketing fuerza a presumir que más encomiástico hubiera sido pluralizar la restricción de las promisiones y acreditar a sus seducidos el lastre de liberarlas. Así, el Estado se eximiría de aplicar inversiones que literalmente solventará la propia sociedad para exaltar derechos. Actualmente se constriñe a lidiar efusivamente para preservar la atribución de vivir en paz, mientras se acoda veladamente un comercio sustantivamente espurio que debería supeditarse a reglas intuidamente lúcidas y rotundas. Las autoridades responsables en la materia deberían adoptar praxis con costo cero y patrocinadoras de los intereses de quienes invariablemente son perturbados por usanzas arbitrariamente lucrativas. Por lo tanto, resultaría equitativo que a los adictos a los sermones publicitarios les incumbiera la eventual franquicia de desbloquear envites tan fatuos como hostigantes.”