Otros análisis del fin de semana

Joaquín Morales Solá
LA NACION

“A pesar de todos sus contratiempos, Massa retiene una cantidad de votos suficientes como para volcar la próxima elección presidencial hacia el oficialismo o la oposición. La tendencia de las encuestas lo alejan del triunfo en octubre, pero no lo eliminan como actor decisivo de esos comicios”, dice Morales Solá. ¿Los votantes que podrían dejarlo se inclinarían más por Scioli o por Macri? Encuestadores afines a estos dos aseguran lo mismo: que los dos ganarían en primera vuelta. En realidad, la pregunta carece aún de respuesta. No obstante, gran parte de los encuestadores se inclina hacia una polarización Scioli-Macri. El núcleo duro del massismo de 2013 se alejó del FR. A su vez, Massa se alejó de muchos aliados importantes porque los maltrató o incumplió promesas. Su problema existencial ahora es no desaparecer. En el sector de Macri sostienen: “ El 65 por ciento de la sociedad quiere un cambio. El argentino que quiere la continuidad lo tiene a Scioli y el que quiere un cambio lo tiene a Macri”. Alude luego al “acto imponente” en Velez y se pregunta: “¿El relanzamiento le permitirá regresar a una competencia en igualdad con los otros dos? Esa fue su gran apuesta”.

Mario Wainfeld
PAGINA 12

Sobre el calendario electoral que corre en el país –al que define de “barroco” dada la gran cantidad de elecciones para intendentes, legisladores y gobernadores que se suceden en todas las jurisdicciones, donde hay además segundas vueltas, alude Wainfeld en su columna. “Hasta ahora hay un solo gobernador con mandato entre 2015 y 2019, es el neuquino Omar Gutiérrez”, detalla. En la ciudad de Buenos Aires, la rotunda victoria de Rodríguez Larreta lo dejó inmejorablemente posicionado, dice. En Neuquén, el MPN “enhebró su noveno triunfo al hilo desde 1983, hegemoniza su provincia”, con un buen desempeño del FpV. En Santa Fe se consolidó Macri. Sus coaliciones con Reutemann y el radicalismo fortalecen su posición. Entre tanto, Massa “reaccionó estos días” y dará pelea. “El ascenso de Macri lo complica”, pero él se consolidó como presidenciable. Sostiene que la existencia de un partido de derecha –el macrismo- con posibilidades de llegar a la Casa Rosada “es una innovación en la historia nacional”. En cuanto a la Presidenta, asegura, “hace campaña gobernando y explicando los riesgos que causaría un gobierno de distinto signo e ideología”.

Eduardo van der Kooy
CLARIN

“Cristina Fernández parece haberle encontrado una solución a Amado Boudou. No sería la mejor para el vicepresidente”, dice Van der Kooy, en su columna titulada “Boudou, prenda de canje por Nisman”. La suerte del vice parece echada, aunque el desenlace suceda cuando deje el poder. “Boudou se encamina sin remedio hacia el juicio oral” y el que le dio el último empujón es el fiscal De Luca, el mismo que hace pocos días enterró la denuncia de Nisman. “Se trata de uno de los más conspicuos integrantes de Justicia Legítima, de identidad K”. Nadie podría suponer que De Luca “tomó la decisión que tomó sobre Boudou sin una venia de la Casa Rosada”. Analiza algunos pasos procesales seguidos en las causas de Nisman y de Boudou: “En ambos casos existieron fallos tendientes a borrar del mapa la denuncia del fiscal muerto y a desproteger al vicepresidente. Tal vez, la prenda de canje para salvar a Cristina y no incinerar a los funcionarios de la Justicia”. Asegura luego que “la denuncia y la muerte de Nisman tuvieron para Cristina un costo social que en apariencia –según las encuestas– ha logrado, con sus múltiples maniobras, remontar. Pero dejó un lastre ilevantable en el Poder Judicial. De allí la suerte adversa para Boudou”..

Jorge Fernández Díaz
LA NACION

“Los políticos son como los cines de barrio, primero te hacen entrar y después te cambian el programa” es la cita del humorista español Jardiel Poncela que emplea Fernández Díaz para definir la actualidad política. “Scioli cultiva como pocos el arte de la elusión amistosa”, dice. Esta semana “convalidó en su media lengua a Milani y el agresivo copamiento estatal de La Cámpora; relativizó el cepo y defendió al Indec, y se permitió chicanas elegantes contra el FMI”. En tanto, fuentes allegadas a Scioli “informan por lo bajo que luego de ganar las primarias comenzará a despegarse de las taras kirchneristas para buscar el voto independiente y que, al final, si alcanza el poder, impondrá su voluntad de manera cortés, pero terminante”. Ningún economista, de cualquier partido político, duda cerca de que habrá cambios, pero es una verdad que no conviene decirla. “En todos lados hay progres y conservadores, socialdemócratas y desarrollistas, peronistas y radicales. Y en esa gelatina, todos necesitan poner etiquetas exageradas y apócrifas para justificarse y despejar el desorden”. Afirma luego que “la política argentina, luego de un fuerte populismo personalista, precisa de una nueva cartografía y de brújulas eficientes”.