Apareció muerto un testigo clave del doble crimen de Cañuelas

Mario Corbalán, uno de los principales testigos de la fiscalía en el caso por el doble crimen de los hermanos Leonardo y Marcelo Massa en Cañuelas, por el que dos hombres están siendo juzgados en nuestra ciudad, apareció muerto el lunes pasado en la Unidad 31 de Florencio Varela, donde se encontraba detenido.

Fuentes del Ministerio de Seguridad confirmaron el hecho a un portal de Cañuelas y, si bien se investigan las circunstancias del deceso, la primera hipótesis apuntaría a un supuesto suicidio. Incluso, trascendió de los mismos voceros, que la víctima habría dejado una carta destinada a su esposa explicando los motivos que lo llevaron a tomar esa trágica decisión.

Durante la investigación por el doble homicidio de los hermanos Massa en 2013, llevada a cabo por el ex fiscal César Robatto, el testimonio de Corbalán había sido esencial.

Los informantes destacaron que había sido la persona que dio detalles de la relación que unía a los dos acusados -Fernando Marconi y Edgardo Sagini Rodríguez-, a quienes conoció cuando compartió celda en 2010.

Corbalán incluso aseguró que durante la reclusión Marconi le cocinaba a Sagini, un detenido mucho más violento y peligroso, que de hecho está sospechado de ser el autor material del doble crimen.

Aparentemente, Corbalán utilizó una sábana para colgarse y murió por asfixia.

Como se sabe, el debate por el doble crimen de los hermanos Massa se reprogramó tras la asunción del defensor particular, Julio Beley, como representante de Edgardo Sagini, quien en la primera jornada de debate atacó a quien en ese entonces era su abogada -oficial-, María Vigorelli.

Al ser contenido por tres guardias de seguridad, Sagini fue reducido y Vigorelli renunció a su defensa.

La primera medida solicitada por Beley fue la de posponer el juicio para ponerse al tanto de la causa para garantizar la mejor defensa para su cliente.

El Tribunal Oral en lo Criminal V de La Plata, con la presidencia de la jueza Carmen Palacios Arias, ordenó que el debate se reprograme para el próximo 10 de junio.

Por su parte, los abogados querellantes, Juan Tiberio y Fabián Améndola, prestaron conformidad con el requerimiento de Beley al igual que el defensor Rubén Carrozone, quien presta sus servicios ante el otro acusado: Fernando Rusconi.

El Tribunal ordenó reprogramar el juicio para los días: 10, 12, 17, 18, 19, 22, 23 y 29 de junio venidero.

En el debate se prevé que declaren al menos 100 testigos entre oculares y peritos.