Apareció Rut Avila Zambrana sana y salva

La joven Rut Ávila Zambrana (19) fue encontrada esta tarde en el barrio La Loma por la Policía, a poco de cumplirse un mes de su desaparición, informaron fuentes oficiales.

De acuerdo a los primeros datos, Rut habría retirado dinero en un cajero automático cercano a la Comisaría Cuarta ubicada en diagonal 73 entre 41 y 42.

Presumiblemente, luego de sacar el efectivo se dirigió a la esquina de 15 y 32 donde estaba a punto de abordar un colectivo.

Fue en ese lugar donde efectivos de la policía local hicieron contacto con la joven y avisaron a sus padres.

Horas más tarde, la Fiscal Betina Lacki y el comisario Darío Camerini dieron una conferencia de prensa en la que mencionaron detalles del encuentro, como por ejemplo que Rut "no estaba enterada" de la gran movilización que se realizó en La Plata para esclarecer su paradero.

También se supo que había huido voluntariamente de su casa para "buscar trabajo" -habría conseguido uno de mucama- y que estaba viviendo en una pensión de Parque Patricios. 

Por último, Rut le dijo a la fiscal que su intención no es volver con sus padres.

TRES MARCHAS Y MILES DE PERSONAS EN SU BÚSQUEDA

Cabe recordar que Rut faltaba de su casa desde el 18 de agosto último, cuando salió temprano de su vivienda de 523 entre 144 y 145, presuntamente para ir a cursar a la facultad de Ingeniería, y nada más se supo sobre su paradero.

En la Ciudad hubo tres marchas pidiendo por su aparición, la última de ellas fue el jueves pasado en el Centro, donde participaron unas 1.000 personas, entre familiares, estudiantes y docentes universitarios, dirigentes de entidades defensoras de derechos humanos y militantes de agrupaciones de izquierda.

Rut es la mayor de cinco hermanos. Su familia llegó desde Bolivia y se instaló en el barrio de La Granja hace ya casi dos décadas.

La joven estudió en el conservatorio Gilardo Gilardi antes de ingresar a la UNLP, donde estudia ingeniería electromecánica.

Según cuentan sus familiares, Rut es una chica “más bien tímida. No tiene muchos amigos y nunca anduvo de novia. Jamás. Su mayor pasión es la música cristiana y el violín. Se la pasaba tocando, y durante los fines de semana, cuando no tenía que rendir algún examen, le gustaba participar de los campamentos cristianos que organiza el templo”, aseguró su prima Mery en diálogo con EL DÍA.

“Ella no se iría por su cuenta, jamás lo hizo y no tenía ningún motivo para hacerlo ahora”, había dicho en aquella oportunidad.