Condenan a 12 años de prisión a falso promotor acusado de abuso

El Tribunal Oral en lo Criminal II de La Plata condenó ayer a 12 años de prisión a Diego Barral (47), un fotógrafo acusado de haber captado, a través de las redes sociales, y abusado sexualmente de una menor de edad, y supuestamente convencerla para que ejerciera la prostitución, a cambio de hacerla famosa y vincularla con el ambiente de la moda y los medios.

En el mismo fallo, dictado por los jueces Claudio Bernard, Silvia Hoerr y Liliana Torrisi, por la secretaría de la doctora Laurencia Bruni, se ordenó la captura del condenado, ya que había llegado al juicio oral gozando de la libertad.

En la resolución del juicio oral el Tribunal rechazó los planteos del abogado Humberto Pastor, defensor del imputado; e hizo lugar a lo solicitado por el fiscal de Juicio Rubén Sarlo.

En el fallo se dio por probado que “el 23 de septiembre de 2009, cerca de las 17”, el imputado “llevó a la menor de 15 años a su casa de calle 45”, en pleno centro de nuestra ciudad, “donde la obligó, luego de una sesión fotográfica en ropa interior y desnuda, a practicarle sexo oral y luego la accedió carnalmente vía vaginal, aprovechándose de su inmadurez, con falaces promesas acerca de posibilidades laborales en virtud de su posición ventajosa en cuanto a su mayoría de edad, invocó ser fotógrafo y generó en la víctima la idea de beneficiarse económicamente ejerciendo la prostitución, con eventuales clientes que el mismo le proporcionaría a partir de su conocimiento como fotógrafo famoso”.

“Tal situación de ventaja fue lograda por el acusado a partir de diversas conversaciones e intercambios mediante sistemas de mensajería instantánea denominada chat, siendo que de ese intercambio comunicativo, de modo engañoso generó en la víctima pensamientos positivos respecto del ejercicio de la prostitución, actividad que no solo la beneficiaría económicamente sino que también la acercaría al mundo de la moda y la contactaría con personajes reconocidos mediáticamente”, se precisó en el veredicto.

Los jueces consideraron al acusado culpable por los delitos de “abuso sexual con acceso carnal y facilitamiento de la prostitución”.

Para graduar la pena impuesta, en la sentencia se valoró como atenuante que el imputado carece de de condenas anteriores y no se valoró en ese sentido “el buen concepto formado del procesado por las personas que vinieron a declarar en la audiencia ya que también ha quedado demostrado la personalidad que tiene Barral, donde forma un concepto para `el afuera´, pero tiene otro muy distinto en su vida privada”.

LA REQUISITORIA FISCAL

El doctor Sarlo, la semana pasada, en su alegato, había valorado como prueba contra el acusado los chats que constan en la causa que darían cuenta del hecho antes descripto de captación de la menor.

También advirtió en su acusación sobre “los peligros de internet y redes sociales sin control ante el manejo de los menores”.

También mencionó como prueba el relato de la menor y el de su madre.

Esta última señaló -dijo el fiscal- que un día entró al dormitorio de su hija y vio en la pantalla de su computadora “una foto sexual muy desagradable de un hombre, que proponía situaciones sexuales que redituarían ganancias”.

El fiscal afirmó que esta mujer contó que su hija había faltado a dormir una noche, que alarmada por ello y lo hallado en la computadora comenzó a interrogarla y que fue allí cuando su hija le contó lo ocurrido, y que “en la casa del fotógrafo había ocurrido la violación”.

El imputado, que fue director de Tránsito de La Plata, fue acusado por el fiscal por los mismos delitos por lo que ayer el Tribunal pronunció la condena.