El presidente de Villa San Carlos otra vez vinculado a una causa de juego clandestino

Por una denuncia anónima recibida hace más de dos meses, el presidente del club Villa San Carlos de Berisso, Alejandro Colombo, volvió a quedar involucrado en una causa que investiga una presunta red de juego clandestino en esa ciudad y que incluso tendría fuerte presencia en distintos barrios de La Plata y Ensenada.

Anteanoche, en un operativo conjunto que realizó personal policial con funcionarios del Instituto Provincial de Lotería y Casinos, a partir de la recepción de una serie de datos que lo involucraban con esa maniobra ilegal, allanaron su vivienda particular, junto a otros locales en los que supuestamente se recibían apuestas por fuera del sistema tradicional.

Como se recordará, a fines de 2012 el empresario ya había sido mencionado en otra denuncia por esta misma actividad y hasta pasó varias horas demorado en una comisaría por la tenencia de armas de fuego, algunas de ellas consideradas de guerra.

De acuerdo a fuentes oficiales, en esta ocasión se habrían desmantelado cuatro centros dedicados a levantar apuestas de quiniela y otros juegos de azar, aunque no se precisaron direcciones.

Con respecto al operativo en el domicilio de Colombo, integrantes de la Comisión de Prevención y Represión contra el Juego Ilegal informaron ayer que “fueron demoraron a tres sujetos, entre ellos al responsable de una red clandestina de apuestas, conocido como `Alejo`”.

Sin embargo, el titular del club de Berisso negó rotundamente esa versión y, si bien reconoció la existencia del procedimiento, aseguró que en su casa “no encontraron nada” (ver aparte).

De acuerdo al reporte de los voceros consultados, entre las propiedades inspeccionadas se encuentran “un bunker desde donde operaba un sujeto sindicado como un capitalista histórico de la ciudad y ex presidente del Club Villa San Carlos (Primera B Metropolitana)”.

Al ingresar, los policías de la provincia de Buenos Aires y, los inspectores del IPLC, se encontraron con un salón fuertemente custodiado y vigilado con cámaras de seguridad, que oficiaba de centro de operaciones, dotado con más de 13 teléfonos fax, que recibían las apuestas clandestinas en tiempo real, expresaron las mismas fuentes.

Se supo que durente los allanamientos se habría secuestrado dinero en efectivo, cuadernos con anotaciones, computadoras, calculadoras, teléfonos celulares, varios fax, fichas de póker y cartas, entre otros elementos de interés para la pesquisa.

En el caso interviene el Juzgado de Paz de Ensenada, a cargo de Vanesa Sagasta, en carácter de subrogante del Juzgado de Paz de Berisso. La causa está prevista en la Ley 13.470, que reprime el juego de azar ilegal y establece penas de prisión de hasta un año y multas.

Respecto de esa situación judicial, allegados a la investigación indicaron que “tuvimos que salir a buscar a un juez suplente, porque el natural de la causa no estaba disponible al momento de avalar el procedimiento”.

Cuando se consultó por las razones de ese imprevisto, no pudieron dar mayores detalles.