En una semana hubo ocho robos en la cuadra de 55 entre 9 y 10

La inseguridad viene dejando sus secuelas entre comerciantes y vecinos de un barrio cercano a la Plaza San Martín. Secuelas que se traducen en perjuicios económicos y también en miedo.

No es para menos: según comentaron ayer algunos habitantes del lugar, sólo en la semana transcurrida entre el 17 y el 24 de agosto se registraron ocho robos en negocios y viviendas que están -mayoritariamente- en la cuadra de 55 entre 9 y 10.

A decir de los denunciantes, los ataques se produjeron casi en todos los casos en horas de la madrugada cuando, se quejaron, “no vemos pasar a ningún patrullero por acá”.

NOCHES PELIGROSAS

Luis Nielsen (33) es abogado y uno de los vecinos afectados por el accionar delictivo en dicha zona, al punto que en las dos últimas semanas sufrió un asalto callejero y un intento de robo en su casa.

Al respecto, contó ayer a EL DIA que en la noche del domingo pasado “guardé el auto en la cochera y al salir de ahí me interceptaron cuatro pibes en 10 y 56 para robarme lo que tenía encima”.

“Ya hace 15 días ladrones barretearon la puerta de casa para entrar a robarme. Por suerte desistieron de hacerlo, a lo mejor al ver a alguien que pasaba por el lugar”, especuló el profesional.

Luego de señalar que “por acá hubo algunas entraderas en viviendas”, hizo saber que “en 55 entre 9 y 10 ya le robaron a todos los comercios, pero especialmente en un local de computación de esa cuadra”.

Mencionó que “se da la particularidad de que todos estos robos se han dado durante la noche, cuando las calles están desiertas”.

“Durante el día vemos a cerca de 10 efectivos de la Policía Local. Pero apenas cae el sol, no queda ningún policía. Y tampoco se ven a patrulleros recorriendo la zona”, aseguró Nielsen.

Consultado desde cuándo proliferan los robos en ese sector céntrico, indicó que “recrudecieron en los últimos dos o tres meses. Pero estos problemas vienen dándose desde hace dos a tres años”.

“BANDITA”

En la cuadra que se convirtió en el epicentro del problema ponen el foco en “una bandita” que suele juntarse “desde hace un tiempo en 10 y 55. No sabemos si es para drogarse o para `fichar` los movimientos de los vecinos para elegir dónde robar”, analizaron.

Algunos de quienes viven allí reprocharon que “estamos a sólo tres cuadras de la comisaría Primera y no tenemos la seguridad que tanto necesitamos”.

Por eso, en ese barrio hay quienes ya proponen entrevistarse con autoridades policiales “para reclamar “más presencia policial durante toda la noche”.

Por su parte, Nielsen señaló que “quizá los más perjudicados sean los comerciantes de 55 entre 9 y 10, porque además de entrarles a robar con sus locales cerrados, les destrozan las puertas o las vidrieras para ingresar”.

“Hay que están acobardados y no van a la comisaría a radicar la denuncia”, reflejó.

Según Nielsen, “no sólo la falta de patrullajes incide en estos robos. La oscuridad en esa cuadra es otra aliada de los ladrones”, que también atacan a quienes caminan por la zona o bajan de un auto.