Extraña desaparición de un expediente por un homicidio

En los Tribunales platenses ya hablan de un verdadero “escándalo jurídico”. En principio, porque el caso tardó casi 15 años en llegar a juicio, y como si ese retardo fuera poco ahora salió a la luz la extraña desaparición de un anexo -con valiosa prueba para esclarecer el hecho- de la causa que está en debate oral y tiene como acusados a dos policías sospechados de la muerte de Valeria González (23), una oficial de la comisaría octava, cuyo cadáver, con un balazo en la sien, fue encontrado el 25 de septiembre de 2001 en Tolosa.

En tal sentido, voceros judiciales revelaron que el jueves último, al inicio del juicio a Juan Carlos Veck y Débora Vizcarra, la fiscal Florencia Budiño solicitó la reconstrucción de un anexo, justamente en el que están volcadas las pericias de comunicaciones con el sistema VAIC, de llamadas telefónicas de los involucrados en el caso, y el detalle de los enlaces radiales de las frecuencias policiales el día del hecho.

También señalaron que este faltante lo descubrió en el 2013 la fiscal Maribel Furnus, la primera en actuar en la etapa de Juicio, quien al analizarla descubrió que la causa, de 23 cuerpos, tiene 8 anexos y no 7, como se había señalado al radicarse en el Tribunal.

Las fuentes describieron que la fiscalía de instrucción, por entonces a cargo de Juan Cruz Condomí Alcorta, entregó el expediente con la anotación, 23 cuerpos y 7 anexos, pero Furnus detectó en el cuerpo 15 un despacho de otra fiscal que intervino, Laura De Gregorio, en el que había dispuesto la formación del anexo 8, con la información de las pericias del VAIC y de las llamadas por la radio de Policía. La fiscal Furnus observó que en la causa ese anexo 8 no estaba incorporado, afirmaron las fuentes consultadas.

reconstruyeron una parte

Además relataron que ayer en el debate oral pudo reconstruirse, con la información de peritos oficiales y soporte informático, el análisis del VAIC. También ayer- agregaron- el Tribunal ordenó que se libren oficios a diversas dependencias del ministerio de Seguridad y jefatura de Policía, para que informen sobre las llamadas por la frecuencia policial en la fecha del hecho.

Esos informes se darán a conocer en la nueva jornada de este debate oral, fijada para el viernes próximo.

Luego de esa instancia, las partes definirán si se toman o no plazo para ofrecer nueva prueba o la intervención de peritos de parte para compulsar las evidencias reconstruidas, y a partir de allí, se decidirá si avanza o no el juicio con la declaración de los testigos del hecho ya citados a este debate.

Como se sabe, en el dictamen de elevación a juicio se dio por acreditado que, en la fecha antes señalada, “un hombre, con la participación de una mujer, efectuó en el interior de un Chévrolet Corsa un disparo de arma de fuego que impactó en el cráneo de González, provocándole la muerte”.

Diez años después el fiscal Condomí Alcorta descartó por completo el suicidio, hipótesis que se había manejado al comienzo de la investigación, se presume que a partir de una serie de maniobras de ocultamiento y preparación de pruebas para simular que la chica se había quitado la vida.