Golpearon y ataron con precintos al dueño de una conocida pizzería

Tan violento como planeado pareció haber sido el robo que un comerciante sufrió en su casa, sin que nadie lo defendiera, y en el que quedó a merced de los ladrones: lo ataron y le pegaron para sacarle todo el efectivo que tenía.

El escenario de este golpe, que sucedió a última hora de la tarde del miércoles, fue Villa Copello, un barrio de las afueras de Berisso, al que se accede por la continuación de la avenida 122.

A la vera de la ruta 11, a la altura de la calle 638, se puede ver el paredón externo de la casa de la víctima. Hasta ahí fue un grupo de delincuentes. “Sabían a lo que venían y cómo manejarse”, confió un vocero policial.

Los ladrones esperaron. Como en la vivienda no había nadie cuando ellos llegaron, debieron aguardar a que lo hiciera la víctima, de acuerdo a lo dicho por fuentes del caso.

El choque entre unos y el otro implicó violencia desde el primer momento. El hombre asaltado, de unos 75 años y del que no trascendió su nombre, se sorprendió por demás ante la inesperada presencia de los intrusos.

maltratos constantes

Sin perder ni un segundo, los delincuentes lo redujeron a punta de pistola para después comenzar a pegarle, señalaron informantes de la comisaría y también vecinos del barrio. A metros de la escena de los hechos había quienes admitieron escuchar gritos, primero de auxilio y luego de dolor. Sin embargo, nadie habría avisado a la policía en ese momento.

Esos ruidos no eran otra cosa que los indicios del castigo al que era sometido el comerciante, dueño de una conocida pizzería de 1 y diagonal 79, según el comentario de un vecino.

Durante más de una hora a la víctima la sometieron a golpes y también la maniataron con precintos. Esa maniobra se suma a la lista de indicios que a los investigadores les dan para pensar que “el golpe estuvo planeado por completo”.

Una vez más, se trató de delincuentes cuyo único interés era apoderarse del dinero que hubiera en la casa. “Conocían en dónde había plata, además de todos los movimientos del lugar”, soltó otro investigador.

Unos 30 mil pesos se habrían llevado los asaltantes, según las versiones que circularon ayer, que no pudieron ser confirmadas oficialmente.

No hubo información acerca de que también se hayan robado otros elementos de valor.

A bordo de un vehículo que hasta el momento no fue identificado, los delincuentes se apuraron en irse una vez que arrasaron con lo que habían ido a buscar.

La policía fue convocada rápido, pero los primeros intentos por capturar a la banda fueron infructuosos.

inteligencia previa

Lo primero que procuraron averiguar los uniformados y peritos es por dónde entraron los ladrones. El abanico de posibilidades es amplio, debido a que a la vivienda se puede acceder por las dos calles, y hasta por las casas linderas.

A medida que escuchaban el relato de la víctima, que tuvo que recibir asistencia médica por las lastimaduras, los oficiales se fueron convenciendo cada vez más de que para dar este golpe los asaltantes necesitaron hacer inteligencia previa.

Inclusive, los delincuentes “dijeron que habían ido de parte de una persona a la que nombraron”, soltó un pesquisa.

En el barrio había varios asombrados por el tenor de este asalto. Aunque algunos discreparon: “Por acá ya nos robaron a todos. Esta zona no es como La Plata pero tampoco es el paraíso”, opinó un vecino. Por estas horas el trabajo de los investigadores está “orientado”, pero ellos mismos aclararon también que “recién empieza”.