“Los Pepitos”, una banda juvenil con antecedentes que asustan

La banda de “Los Pepitos” sigue siendo noticia. Esta vez por su estructura y peligrosidad.

Según confiaron a este diario fuentes del caso, cinco menores son los que integran el núcleo duro de la organización, aunque contarían con la adhesión de otros adolescentes, todos del barrio San José de Ensenada e igual de violentos, que en muchas ocasiones cumplirían diferentes funciones o roles para la consumación de los delitos.

Los líderes, siempre en base a los datos brindados por los voceros consultados, serían “El Peladito”, de 14 años, y “El Dulio”, que ya cumplió 16.

Sólo entre ellos dos se pueden contar 17 causas penales, en un lapso de tiempo que no llega a los dos años.

Por ejemplo, el más chico cuenta con antecedentes por “robo calificado, abuso sexual sin acceso carnal, abuso de arma y resistencia a la autoridad”, del 22/09/14; “tentativa de robo”, del 15/10/14; “hallazgo de motovehículo, robo calificado motovehículo”, del 10/01/15; “daños”, del 22/01/15; “lesiones”, del 30/01/15; “hallazgo de motovehículo, robo calificado motovehículo” y “robo”, del 02/03/15; “tentativa de robo calificado, hallazgo de motovehículo y averiguación de ilícito, resistencia a la autoridad y daños calificados”, del 02/03/15.

En tanto, al de 16 lo acusan por “amenazas”, del 12/12/12; “robo motovehículo”, del 28/01/13; “abuso de armas”, del 11/05/13; “daño”, del 13/07/13; “robo”, del 18/07/13; “atentado y resistencia a la autoridad y lesiones”, del 06/04/14; “amenazas”, del 27/04/14; “robo en poblado y en banda”, del 03/09/14; “lesiones y amenazas”, del 08/09/14 y “robo calificado en grado de tentativa por el empleo de arma de fuego”, del 08/12/14.

Por si fuera poco, “El Dulio” tendría al padre y a un hermano detenidos por un asesinato, hace varios años, en un taller mecánico de 125 y 41.

Por esta razón, la Municipalidad de Ensenada insiste con sus reclamos para que la Justicia del Fuero de Responsabilidad Penal Juvenil les imponga una medida de seguridad, que los saque de la calle y los ponga a resguardo, al igual que a los vecinos de buena parte de la Región, que sufren su desaprensivo accionar.