"El Capo": mafia y romance en la nueva ficción de Telefé

Con una propuesta que se avizora interesante y en un primer capítulo que sirvió para pintar el cuadro de personajes y relaciones arrancó el lunes "El Capo", la ficción del prime time de Telefé que cuenta con protagónicos de Miguel Angel Rodríguez y Gianella Neyra y libros de los autores de "Resistiré", Adriana Lorenzón y Marcelo Caamaño.

El debut de esta comedia dramática que utiliza el ambiente de una mafia porteña en la que intervienen distintas colectividades (italiana, siria, judía) para tejer sobre ellas una narrativa de amores y toques de realidad, marcó en su capítulo debut 25.3 de rating, convirtiéndose en el segundo programa más visto.

El show de "Bailando por un sueño", con amenazas telefónicas para parte del jurado y llantos televisivos a cargo del piquetero Raúl Castells no resignó el liderazgo y con 27.5 se mantuvo al tope de las preferencias del público, en una jornada en que Canal 13 se quedó con el "prime time" y Telefé con la general del día.

La segunda emisión del "Gran Hermano Famosos", que tuvo las características de un debate conducido por Marcelo Peluffo y la troupe habitual de panelistas bajó sensiblemente los números respecto del debut, y quedó quinto con 19.2, lejos de los 35 puntos que cosechó en su estreno del domingo.

Los "top five" de este superlunes, se completaron con una buena performance de "Son de Fierro" que marcó 23.3 y quedó tercero y el cuarto lugar para "Susana Giménez" que hizo 22.5, según datos de la consultora Ibope.

LA NOVELA

El capítulo lanzamiento de "El Capo" sirvió para dejar planteado el escenario, donde tres clanes familiares interactúan en el control de una serie de negocios ilegales en forma mancomunada pero sin dejar de competir y establecer confrontaciones sobre la hegemonía del grupo.

La historia arranca cuando obligado por la Justicia, el mandamás del clan, Don Chicho (Hugo Arana) decide retirarse temporariamente del manejo de los negocios y deja en su lugar a Omar Yariff (Miguel Angel Rodríguez), un vendedor de alfombras hijo de una antiguo capomafia fallecido, pero que siempre se mantuvo al margen de la actividad.

Aunque todavía parece resistirse a asumir los negocios "non sanctos" del clan, Yariff formará rápidamente parte de la pandilla y se convertirá, como reza el slogan de la serie, en un "mafioso contra su voluntad", que a lo largo de la temporada siempre se debatirá entre "el bien y el mal", en una suerte de dualidad sobreobjetivos, fines y métodos, que Rodríguez ya encarnó en "Los Roldán".

En este caso, a diferencia de la serie del puestero convertido en jefe de un conglomerado industrial, que hereda a Lorenzón en la autoría del libreto, la narrativa parece más jugada hacia las cuestiones dramáticas y pasionales, despegándose del costado más humorístico y grotesco que tuvo "Los Roldán".

Habrá que ver entonces si este toque de "realidad" permite a los autores evitar ciertos costados poco creíbles, como una primera escena de "besamanos", que hizo recordar al final de "El Padrino II" pero bordeando el ridículo por lo impostada.

En el plano sentimental, ya se vislumbra un juego entre Yariff y la hija mayor de Don Chicho, personificada por Gianella Neyra, que viene a traer ciertas esperanzas al corazón del vendedor de alfombras, que sostiene una desapasionada relación amorosa con su esposa, interpretada por Silvia Kutika.

También del lado de un hijo de Yariff (Mariano Torre) y la otra hija de Don Chicho (Luisana Lopilato) parecen poder encenderse ciertas llamas, que el futuro televisivo dirá si arden y de qué modo.

Roberto Carnaghi como el tercero en disputa dentro del clan mafioso y líder de una familia judía que también componen Maxi Ghione y Darío Lopilato como sus hijos, completa el cuadro de esta mafia "all uso nostro" que deberá sortear algunos obstáculos antes de afirmarse narrativamente.