Acuerdo sobre rescate de Irlanda podría estar listo el domingo

El acuerdo para un préstamo multimillonario para rescatar a Irlanda de la bancarrota podría estar listo en las próximas 24 horas, dijo el sábado un ministro del gobierno irlandés, pero rechazó los reportes de que esa ayuda venga con una elevada tasa de interés.

El ministro de Comunicaciones Eamon Ryan dijo que todas las partes en las negociaciones del paquete financiero que ya llevan 10 días en Dublín quería al menos "un acuerdo preliminar" antes de que los mercados abran el lunes.

En declaraciones para la cadena RTE, Ryan negó que el rescate de 85.000 millones de euros (115.000 millones de dólares) vaya a tener una tasa de interés de 6,7%. "Creo que la cifra es inexacta y es desafortunada porque asustó a muchas personas", dijo.

No obstante, tampoco indicó cuál sería la tasa real, aunque dijo que sería aproximada al 5,2% que pagará Grecia por su rescate de 110.000 millones de euros (150.000 millones de dólares) acordado en mayo.

Ryan dijo que cualesquiera que sean los términos, "deben tener sentido para que podamos pagar".

Otro ministro del gobierno no confiaba tanto en alcanzar el acuerdo para el domingo.

"Nuestro mandato es obtener el mejor acuerdo posible, uno que nos permita salir de esta situación, dijo Noel Dempsey, ministro de Transporte. "Es más importante hacerlo bien que hacerlo rápido".

En tanto, más de 15.000 personas marcharon el sábado por Dublín en la protesta más grande hasta el momento contra el plan de austeridad del gobierno y el inminente rescate financiero internacional.

La protesta, organizada por el Congreso de Sindicatos, una federación de agrupaciones con un total de unos 832.000 miembros, también aumentó el temor de que el próximo presupuesto de emergencia pueda hacer que miles caigan en la pobreza o en la quiebra.

El presupuesto para 2011, a ser publicado el 7 de diciembre, busca recortar gastos por 4.500 millones de euros (6.000 millones de dólares) y aumentar la recaudación de impuestos en 1.500 millones de euros (2.000 millones de dólares).

Es la primera gran manifestación desde que representantes de la Unión Europea y el Fondo Monetario Internacional llegaron al Dublín la semana pasada, pero la asistencia fue mucho menor a los 50.000 manifestantes que esperaban la Policía y los organizadores.

Los manifestantes -comandados por el comentarista Fintan O'Toole, entre otros, en un podio instalado frente a la principal oficina postal, centro de la rebelión irlandesa de 1916 contra el régimen británico- pidieron que Irlanda declare suspensión de pagos en sus deudas con bancos internacionales, tal como lo hicieron Islandia y Argentina.

O'Toole dijo que el primer ministro Brian Cowen no tenía facultades para negociar un rescate con funcionarios de la Unión Europea y el FMI "que nadie eligió". También acusó a Cowen de "esperar que nos comportemos y paguemos las deudas de juego de nuestros amos".

Aunque la protesta transcurrió de manera pacífica, algunos manifestantes lanzaron botellas, huevos y juegos pirotécnicos contra la Policía. Las autoridades no reportaron ningún arresto.