Absolvieron a mánager del grupo bailantero Karicias

La Cámara Penal platense absolvió ayer de culpa y cargo, al detectar fallas en la acusación fiscal, al acusado de ser el autor intelectual del asesinato del ex líder del grupo bailantero Karicias, Carlos Chávez Navarrete (37), ocurrido en 1997, en Alejandro Korn.

El procesado, José Carlos "Cholo" Oyola, el conocido mánager de grupos bailanteros, festejó en la sala de audiencias la resolución judicial, se abrazó con sus defensores y luego saludó efusivamente a los jueces.

Los Camaristas Raúl Dalto, Alejandro Villordo y María Riusech escucharon al inicio del debate los lineamientos de la fiscal de Juicio Beatriz Castellanos, quien adelantó que en el debate iba a probar que Oyola contrató a personas, pero para que le dieran un susto a la víctima.

También dijo que estos contratados se excedieron y le dieron muerte a Navarrete.

Por este homicidio, en marzo de 2001, los camaristas platenses Alfredo Sanucci, Carlos Silva Acevedo y Armando Correa, condenaron a Jorge Pavón a prisión perpetua por "homicidio agravado por alevosía, con promesa remuneratoria y por el concurso premeditado de dos o más personas".

En el 2008, en un segundo debate, la misma Sala III, integrada por los jueces Javier Guzmán, Luis Soria y Sergio Almeida, absolvió a Aldevinas Pastarnokas.

Los magistrados, en su veredicto, fueron concluyentes y aseguraron que no se dio por probado la participación del acusado en el crimen.

Cabe recordar que la fiscalía de juicio, a cargo de Rosalía Sánchez, le había solicitado a Pastarnokas la pena de reclusión perpetua, acusación que no prosperó.

INSOLITA SITUACION

Ayer, en el tercer juicio, la fiscal Castellanos mantuvo firme los términos de su lineamiento inicial y encuadró el caso como homicidio calificado por promesa remuneratoria, aunque al describir la materialidad ilícita no mencionó el ofrecimiento de dinero.

Los camaristas trataron el tema como una cuestión preliminar y concluyeron que no podía prosperar esa acusación, que a lo sumo, por su descripción de los hechos estaría constituyendo un caso de amenazas, delito que ya prescribió.

Por estas razones los jueces resolvieron absolver de culpa y cargo a Oyola.