Crece la demanda de los autos que pagarán más impuesto

El proyecto enviado al Congreso de elevar de 10 al 50 por ciento el impuesto a la compra de autos de valores superiores a los 170.000 pesos, que equivale a unos 235.000 pesos de valor de venta al público, de las motos de más de 40.000 pesos y para las aeronaves y embarcaciones de más de 170.000 pesos, generó este fin de semana una oleada de consultas en los concesionarios automotrices. Es que cuando comience a aplicarse la norma, el aumento en los precios variaría de entre un 25 y un 30 por ciento según el modelo, estimaron fuentes del sector.

La concurrencia de potenciales clientes fue tan alta, que en muchas concesionarias, en especial de autos importados, ya se especula que no se podrían cumplir con la demanda, con los stocks que prácticamente ya estaban hasta fin de año.

Sucede que esta medida viene a modificar sustancialmente una de las prácticas tradicionales del mercado automotriz argentino y que hace que sobre el final de año las ventas se reduzcan sustancialmente, para patentar el vehículo con el nuevo año. Pero ahora, esta lógica se modificó radicalmente debido a que la norma que debe ser tratada por el Congreso, en caso de ser aprobada como se descuenta, regiría a partir del 1º de enero de 2014.

De esta forma, las concesionarias se vieron con alta demanda de potenciales compradores, quienes igual manifestaron todas sus dudas respecto al valor final que deberán pagar los modelos alcanzados por la medida.

Cabe recordar que a estos impuestos hay que sumarles, IVA, Ingresos Brutos y el margen de las concesionarias.

LOS MODELOS AFECTADOS

Es claro que uno de los factores que han llevado a este 2013 a quedar al borde del récord histórico de ventas, es que muchos compradores optaron por adquirir un vehículo como forma de escaparle a la inflación y ante las restricciones a la venta de dólares. Ahora la nueva medida se estima que afectará a entre 60.000 y 80.000 unidades, muchas de ellas de producción nacional, lo que ha generado malestar entre los fabricantes.

Al respecto Alberto Príncipe, de la Cámara de Comercio Automotor, destacó que “no se espera un cambio sustancial en estos meses. A lo sumo muchos compradores, alargarán la decisión de compra”. Sin embargo, las firmas de vehículos premium ya especulan que esta situación afectará en especial a sus modelos de menor precio y más volumen de ventas.