El padre Ignacio rezó en silencio en la zona de la explosión

El padre Ignacio Peries, el famoso cura sanador que recibe en Rosario a multitudes para que sean bendecidos por él, rezó en silencio en la zona donde se produjo la explosión del edificio y bendijo a los rescatistas y a sus perros.

Por su parte, la hermana María Jordán, conocida por su asistencia humanitaria y religiosa en barrios carenciados de la ciudad, estuvo en el Centro de Especialidades Médicas Ambulatorias de Rosario (CEMAR), para contener a los familiares de las personas fallecidas y de los desaparecidos por el derrumbe.

El padre Ignacio arribó anoche al lugar de la tragedia, sobre la calle Salta 2141, donde dejo medallas religiosas.

Asimismo, visitó a los familiares de heridos y personas que buscan a sus familiares en la sede del CEMAR, donde dio contención a las familias, según dijeron algunos allegados a los jóvenes buscados.

Este sacerdote, quien nació en Sri Lanka y se nacionalizó argentino, es el cura párroco de la iglesia Natividad del Señor, en el barrio Rucci, de Rosario.

Miles de personas de diferentes zonas del país y hasta del extranjero acuden a visitar al padre Ignacio para obtener su sanación