Game of Thrones, una serie que ya se convirtió en pasión de multitudes

Desde hace ya tres años para esta época, millones de fanáticos en todo el mundo se congregan ante la tele y susurran como si fuera un mantra hipnótico: Winter is coming . Por delante les espera una hora de aventuras épicas y una despiadada lucha por el poder, todo ello ambientado en escenarios espectaculares de Irlanda del norte. Pero, cuando el capítulo y la temporada acaban, lo que comienza para los fanáticos es un tiempo de inaguantable espera y conjeturas sobre qué sucederá en los próximos episodios. Ése es el cautivador poder de “Game of Thrones”, la serie de HBO que adapta la saga fantástica de George R. R. Martin y que acaba de cerrar su cuarta temporada de la misma manera que las entregas anteriores: con récords de audiencia en todo el mundo.

No es exageración: la exitosa serie se ha convertido en un fenómeno a nivel global que arrastra a seguidores totalmente rendidos en torno a las luchas de los Stark, los Lannister o los Targaryen por hacerse con el Trono de Hierro.

La cuarta temporada, un nuevo triunfo tanto de crítica como de audiencia, ha deparado numerosas sorpresas y giros inesperados a lo largo de diez episodios. Aunque “Game of Thrones” se caracteriza desde sus inicios por sus numerosas y brutales muertes violentas, el parte de bajas que dejó esta cuarta temporada impresiona y llama la atención, tanto por el número de víctimas como por la desaparición de importantes personajes para la trama.

El último en caer fue el calculador y poderoso Tywin Lannister, quien murió a manos de su hijo enano Tyrion, el carismático personaje interpretado por Peter Dinklage. Con una ballesta puso fin a la vida de su padre, quien trató durante toda la temporada de condenarlo a la pena capital.

La cuarta temporada no ha sido desde luego apacible para la Casa Lannister. La muerte por envenenamiento del rey Joffrey, quizá uno de los personajes más odiados por los aficionados, sacudió los cimientos de la familia que gobierna en Desembarco del Rey. Tyrion fue acusado falsamente del regicidio, y su padre Tywin y su hermana Cersei fueron precisamente los más activos contra él.

El juicio por combate de Tyrion trajo una de las escenas más violentas y comentadas en las redes sociales. Por parte de la acusación luchó Gregor Clegane, el enorme guerrero conocido como The Mountain; por parte de Tyrion, combatió el seductor Oberyn Martell, quien buscaba venganza contra los Lannister por la muerte de su hermana. El desenlace del épico duelo ya forma parte del imaginario de la serie: The Mountain, herido de muerte, aplastó literalmente el cráneo del príncipe Martell.

Otro duelo terminó con la vida de The Hound, el guerrero que secuestró a Arya Stark. Su asesina fue Brienne de Tarth, la mujer caballero que juró fidelidad a los Stark y que cumplió su promesa con sangre.

Y si se habla de sangre, la hubo y en cantidades descomunales en el impresionante asedio al Muro. Sucedió en el penúltimo capítulo de la temporada y fue una emisión atípica: en lugar de una narración paralela con diferentes historias, el episodio se dedicó exclusivamente a la espectacular defensa de la Guardia de la Noche.

Cada vez que en “Game of Thrones” se mira al norte, aparecen los problemas. Y esta vez llegaban por todos los frentes. Por el norte, Mance Rayder con su inmenso ejército de hombres acompañados por mamuts y gigantes. En la retaguardia, el Castillo Negro sufría el asedio de los hombre salvajes. La Guardia de la Noche resistió liderada por un cada vez más importante Jon Snow, para quien la victoria fue muy amarga por la muerte de su amor, Ygritte.

CONTINuA LA LUCHA

Con los Lannister más débiles que nunca, las principales Casas ya ponen sus ojos en Desembarco del Rey y dejan todo abierto de cara a la quinta temporada, que aún no tiene fecha de estreno, pero que promete continuar con la habitual ración de guerra, fantasía, escenas de sexo y dragones.

Uno de los personajes más reforzados de la cuarta temporada de “Game of Thrones” es Stannis Baratheon, cuyo ejército apareció sorpresivamente en el Norte para derrotar con contundencia a Mance Rayder más allá del Muro.

Mientras tanto, Daenerys Targaryen prosigue con su triunfal misión liberadora, tras la toma de la gran ciudad de Meereen, aunque con ciertas dificultades: le cuesta mantener su poder en las ciudades conquistadas, ha perdido a su fiel consejero Jorah Mormont y sus dragones son cada vez menos dóciles...

Con todos sus miembros asesinados o dispersos, los Stark han recuperado cierta fuerza gracias sobre todo al ejemplar desempeño del valiente Jon Snow en el Muro. En cambio, Arya acaba la temporada casi convertida en guerrera, ya liberada de The Hound, mientras su hermano Bran continúa con sus visiones y llega a los misteriosos dominios de Los Niños. Ambos parecen predestinados a grandes momentos en el futuro de la serie.

Por su parte, los Greyjoy tratan de liberar a Theon, prisionero del despiadado Ramsay Snow, quien le ha lavado el cerebro y lo mantiene bajo su poder. Y en el Nido de Águilas, el maquiavélico Lord Baelish se ha hecho fuerte tras asesinar a Lysa Tully y engatusar a Sansa Stark.

Todas estas Casas tienen cuentas pendientes para la quinta temporada, pero no son los únicos interrogantes por responder en la serie. Por ejemplo, los siniestros White Walkers continúan amenazando el norte, mientras en el sur la ciudad de Braavos parece que contará con un protagonismo mayor en próximos capítulos.

Demasiadas incógnitas y asuntos por resolver, pero todo ello queda en suspense por ahora. Como hacen los millones de fans de “Game of Thrones” cada año, habrá que esperar previsiblemente hasta abril para continuar con la historia y conocer quién se sentará finalmente en el Trono de Hierro.

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