Piden a la Gendarmería para frenar la ola de violencia en Mar del Plata

En lo que va del año ya se registraron 28 homicidios en Mar del Plata, casi un 65% más que en los primeros tres meses del año pasado, cuando se contaban 17.

Ante esa situación, el intendente Gustavo Pulti le planteó a la ministra de Seguridad de la Nación, María Cecilia Rodríguez, la necesidad de contar con el apoyo de alguna división de Gendarmería, no sólo para que patrulle las calles, si no que, a través de distintas tareas de inteligencia, se pueda llegar al fondo del problema y tratar de encontrarle una solución.

El delito, como se dijo, parece afianzado en esta ciudad y algunos dicen que se trata del llamado fenómeno de la “Conurbanización”.

En la lista de asesinados hay desde buscavidas hasta el ayudante de un fiscal. Incluso, en menos de 48 horas, mataron a dos personas muy cercanas al jefe comunal, incluido el citado funcionario judicial.

En la fría estadística hay un poco de todo. Homicidios en robos y entraderas y, sobre todo, mucha sangre derramada y vidas perdidas en un abanico que incluye ajustes de cuentas por temas de droga, conflictos familiares y riñas.

El último fin de semana largo fue mortal y casi sin antecedentes: se cometieron cinco homicidios. En medio se sumó un sexto con la confirmación del deceso de una víctima de robo tras una agonía de más de seis días.

Tras estos episodios, el jefe de la Policía, comisario general Hugo Matzkin, se instaló en Mar del Plata con el objetivo de revisar la disponibilidad de personal y volcar más efectivos a la calle, en particular en las zonas más calientes o peligrosas.

Sin embargo, para el jefe comunal con eso solo no alcanza y por eso solicitó también a la Gendarmería.

“Así como respaldamos el pedido del fiscal general Fabián Fernández Garello para que se fortalezca el área de investigaciones de la Policía provincial y ya se incorporó más gente, de la misma manera pedimos similar fortalecimiento desde las fuerzas federales”, explicó en una nota a un diario porteño.

Agregó que con esfuerzos como el planteado se busca “desbaratar bandas que operan en la trastienda del delito que se manifiesta en la superficie”.

POLICIA LOCAL

Mar del Plata tendrá en breve su propia Policía local, pero será dentro de un año, aunque las prácticas de calle de los aspirantes comenzarán en septiembre pasado.

Hubo 3.000 inscriptos para 702 efectivos que ya desde la instrucción y, luego como egresados, estarán al comando del comisionado Fernando Telpuk, quien fue un alto funcionario de la Policía de Seguridad Aeroportuaria.

Los asaltos a mano armada son moneda corriente en esta ciudad. Roban, pero además matan.

La última víctima de un homicidio fue Atilio Canale, ayudante del fiscal de Pinamar.

Vivía con su esposa y tres hijas en el barrio Parque Luro, de Mar del Plata, pero trabajaba en General Madariaga.

El martes por la noche había ingresado su auto en el garaje cuando fue atacado por uno o más desconocidos.

Recibió un tiro en el pecho. Su familia sólo oyó el disparo, algunos gritos y una moto que se alejaba.

Murió en una patrulla policial, camino al hospital.

Se presume que intentaron asaltarlo, pero aún hay otras hipótesis abiertas, porque escasean las pistas y ni siquiera hay sospechosos.

LAS ENTRADERAS

La modalidad denominada “entradera”, que parece coincidir con el caso Canale, está acentuada en la ciudad. Y es otro de los fenómenos que mayor temor provoca en la población.